Tras un año de pausa, mitad forzada mitad pretendida, el salón náutico de Palma de Mallorca, ahora rebautizado como Palma Boat Show, volvió a llenar los pantalanes del Moll Vell de la ciudad recuperando su posición de referente de pretemporada y devolviendo una moderada confianza y optimismo al sector náutico.
Germán de Soler
Sería exagerado afirmar que, como el ave Fénix, el salón de Palma ha renacido de sus cenizas ya que hablando en propiedad nunca entró en autocombustión irreversible. Pero sí decir que tras el cerrojazo forzoso de la pasada edición, que dejó desiertos los pantalanes del Moll Vell de Palma y huérfana de un salón necesario a la comunidad náutica balear y peninsular en una época clave a las puertas del verano, el salón ha sabido sobreponerse a las difíciles circunstancias que atraviesa la industria de la náutica de recreo en nuestro país y generar un evento de resonancia internacional.
Justo es reconocer que no era tarea fácil y poca confianza había en el sector, hasta el último momento, en que esto fuera posible. Sin embargo lo ha sido, y no precisamente gracias a una conjunción astral o a una coincidencia de casualidades , sino por una suma de voluntades públicas y privadas que han sabido poner, del 1 al 5 de mayo, el puerto de Palma, la bahía y sus infraestructuras —entre las mayores y mejores en cuanto a industrias y redes de servicios técnicos especializado en náutica de todo el Mediterráneo— en el centro de las miradas.
¿Salón de novedades?
A estas alturas de la temporada pocos son los aficionados que desconocen las novedades que se han presentado a lo largo del año. Sin embargo, entre septiembre y Semana Santa pocas oportunidades hay para verlas en el agua. Es ahí donde ha incidido siempre el salón de Palma y donde, tras el paréntesis de 2012, ha vuelto a acupar su posición con un cambio de modelo, un formato de evento diferente e inclusivo, que aglutina todos los actores que intervienen en la nàutica de recreo.
El nuevo Palma Boat Show configura un cambio de modelo que abarca todos los sectores de la náutica de recreo y el turismo náutico.
A la espera de un contexto económico más favorable que el actual, el salón ha sabido compatibilizar su oferta con la realidad del mercado, apostando por potenciar y las posibilidades de Baleares como destino náutico y atrayendo tanto al barco nuevo como al de segunda mano.
Así, pese a no ser un salón estrictamente de novedades, los aficionados sí pudieron ver en el Moll Vell muchas de las más relevantes presentadas por los distribuïdores locales y los más importantes de la península. El nuevo modelo se ha mostrado pues acertado y no ha dejado huérfanas las expectativas de quienes se desplazaron hasta Palma, lo que constituye el mejor argumento para preparar una próxima edición más completa.
Una semana plagada de eventos
Durante esta semana, en Palma ha coincidido la celebración de la Gaastra Palma Vela, que ha sacado a la bahía centenares de velas y regatistas internacionales de todas las clases, desde los Wally y Mini Maxi a los clásicos y época, pasando por los monotipos como J80 y Soto 40 y por supuesto los ORC o la vela latina, en un soberbio espectáculo.
No menos relevantes han sido en el marco del salón las presentaciones de regatas como la XXVII Rei en Jaume, puntuable para el Campeonato de España de Altura, Zona Mediterráneo que se desarrollará del 6 al 8 de junio y que incluirá un nuevo premio para las embarcaciones de más de 50 pies de eslora y una clasificación por clubes.
O la presentación del Circuito Clásico Mare Nostrum formado por el Trofeo Illes Balears Classics, organizado por el Club de Mar Mallorca, el Trofeo Panerai-Copa del Rey de Barcos Clásicos de Maó, organizada por el Club Marítimo de la capital menorquina, la Regata Puig Vela Clàssica de Barcelona, organizada por el Club Náutico Barcelona, y la Cartagena Vela Clásica.
También la Conselleria de Medi Ambient del Govern Balear ha aprovechado el evento para presentar el plan de regulación de fondeos ecológicos para la protección de la posidonia, un plan esencial, no solo desde el punto de vista de la protección del medio ambiente, sino para el desarrollo sostenible del turismo náutico de las islas.
Y no menos importante, la celebración simultánea al salón del seminario “Blue Growth in the Mediterranean: perspectives of Spain”, que ha reunido bajo los auspicios de la Unión Europea a decenas de especialistas internacionales en más de una veintena de talleres de debate sobre ordenación del espacio marítimo, el desarrollo legal, financiero, turístico, deportivo y comercial de las actividades náuticas en Europa y España.
Especial interés para nosotros cobró en este terreno el taller dedicado al turismo marítimo y costero, en que participaron entre otros Carlos Sanlorenzo, director de ANEN, Margarita Dahlber, presidenta de la Asociación de Empresas Náuticas de Baleares (AENB), y Gabriel Sandoval, presidente de la Asociación Española de Federaciones de Puertos Deportivos y Turísticos., y en la que todos los ponentes coincidieron en destacar la necesidad de armonización fiscal y legislativa del sector náutico español con los países de nuestro entorno, con los que está en franca desventaja desde el punto de vista de la competitividad, tanto en términos de mercado como especialmente en el sector del chárter náutico.
Palma Superyacht Brokerage & Charter Show
Clave del éxito
¿Hubiese tenido el Boat Show Palma la visiblidad internacional que ha tenido sin la presencia de los grandes yates? Definitivamente no. La presencia de más de 50 embarcaciones —mayoritariamente veleros— de más de 24 metros de eslora le ha dado al evento de Palma una relevancia y un atractivo indiscutibles en la esfera internacional.
La presencia de estos grandes barcos —en venta o dedicados al alquiler— fue iniciativa de 6 brokers internacionales, todos ellos con oficina en Palma, siguiendo los pasos del éxito del evento Mallorca Superyacht Days que se celebró en Port Adriano el año pasado. La organización del Palma Boat Show les puso el marco y las facilidades y no la desaprovecharon.
Burgess Yachts, Camper & Nicholsons International, Dahm International, Fraser Yachts, Northrop and Johnson and Ocean Independence han unido sus fuerzas constituyendo la Balearic Yacht Brokers Association (BYBA), que es la entidad que está tras esta iniciativa.
¿Tiene sentido mezclar estos dos eventos? “La respuesta es definitivamente sí —nos confesaba Arne Ploch de Camper & Nicholsons International—Estamos convencidos de que este nuevo formato será un paso positivo para ambos eventos”. Y visto lo visto, siempre con la reserva de los resultados, podemos augurar que el Palma Superyacht Brokerage & Charter Show se convertirá en un referente en igualdad o en mejores condiciones que otros eventos del mismo tipo como los salones del chárter de Antibes o Génova.
De hecho, la BYBA ha firmado un acuerdo de tres años con el Govern Balear para colocar Mallorca, y en particular Palma, como un centro estratégico para grandes yates en el Mediterráneo.
Una apuesta de los grandes borkers a la que los agentes implicados en la celebración del Palma Boat Show le han puesto alfombra roja y cuyo alcance puede ir mucho más allá de lo que ha sido esta primera cata.