En el diseño, las formas, la ergonomía, el software, la electrónica, la mecánica… todo se integra y combina en la náutica de recreo para ofrecer productos únicos, algunos inspirados en el mundo de la automoción, la decoración o la electrónica de consumo. Todo vale con el fin de facilitar la navegación y la maniobra, haciendo los barcos más atractivos y ergonómicos. G.DE SOLER
Más que tendencias lo que veremos en los próximos meses son “ingenios” que marcarán tendencias. Nuevas aportaciones a la tecnología de los motores y de la instrumentación electrónica que introducirán otros hábitos de uso. Torqeedo, por ejemplo, una de las primeras marcas de motores eléctricos, propone la integración de un emisor Bluetooth en sus motores para transmitir mediante una app la información a la tableta o smartphone y convertirlo en una central de datos y ploter, marcando la ruta del barco en la cartografía, y ofreciendo la información de la velocidad, autonomía y consumo.
Electrónica en la tableta o smartphone
La mayoría de los fabricantes de instrumentación electrónica proponen su app de marca —Garmin, Navico, Furuno, Raymarine, etc.—, que una vez instalada en la tablea permite convertir a ésta en un repetidor de datos con toda la información del equipo multifunción. Datos de sonda, cartografía, representación del radar y cualquier otra información que muestre el panel del barco.
Maniobra todavía más fácil
Prácticamente todos los fabricante de motores, tanto fueraborda como dentrofueraborda, ya han introducido el joystick. Un elemento que hace unos años era una rareza para el gobierno y la maniobra de la embarcación, ahora se ha impuesto en cualquier tipo de potencia con motorización doble. Mediante un solo mando el barco se desplaza lateralmente, o en cualquier otra dirección, facilitando el atraque como si se tratara de un juego de niños. A esto se añade lo último en prestaciones de joystick: el gobierno y aceleración, una función que no solamente sirve para la maniobra de atraque sino que también nos permite sustituir la rueda del timón y las palancas de aceleración. Volvo ha sido el primero en entrar en la náutica de recreo con este dispositivo.
Estabilización automática
¿No sabe cómo usar los flaps o trimar el barco? Los estabilizadores automáticos, inteligentes, saben cuándo el barco escora y lo adrizan durante la navegación; cuando el asentamiento es incorrecto y levanta mucho la proa, lo compensan facilitando el planeo; y saben cuándo, con mala mar, debe posicionarse correctamente para navegar mejor. Se basa en sensores especiales, previamente calibrados en función del desplazamiento y la eslora del barco.
Varias versiones de un solo barco… a motor
En diseño de barcos a motor se han impuesto definitivamente dos tendencias: los modelos hard top o cupé, es decir con techo duro descapotable, tipología presente en todas las grandes marcas internacionales. Por otra parte cada día es más frecuente la obtención de diversas tipologías a partir de una misma eslora. Es decir de una ocho metros se ofrece la versión solárium de proa, abierta, coupé, con consola central, cabinada, pesca, con bañera en proa, etc… Varían únicamente las cubiertas. Marcas como Jeanneau, Bénéteau, Quicksilver, Galeon o Bavaria, entre otras, son expertas den diversificar la oferta de un único casco.
Aplicación de soluciones de competición en la vela de crucero
El Sun Odyssey 349 es el primer velero de crucero de serie que incorpora soluciones de maniobra propias de barcos de competición como la supresión del baquestay y de los carriles de escota de mayor y génova, que son substituidos por aros de fricción que, a modo de barber, se regulan desde el piano. Un cambio de costumbres –y de costes- que se implementará en otros modelos dependiendo de su aceptación entre los cruceristas.
Interiores modulares en vela
La vela no escapa de la modularidad y las nuevas unidades juegan con el espacio interior suprimiendo el mamparo de proa como en el Océanis 38, presentando mamparos de proa con puerta de doble batiente como en el Sun Odyssey 349, nuevas ideas para acceso a baño compartido y cabina de popa como en el Dehler 46, ofreciendo la posibilidad de desplazar el mamparo para cambiar la distribución como en los últimos Bavaria, o bien brindando diferentes opciones de distribución de volumen como en el Oceanis 35 en función del uso que se le vaya a dar.
¿Desaparecerá la mesa de cartas?
Probablemente sí. En algunos modelos se ha reducido a la mínima expresión, se ha hecho plegable contra el mamparo de popa o la banda o se comparte con el sofá a modo de mesilla multiuso. En el Bavaria Cruiser 46 se suprime totalmente, cumpliendo esta función la mesa central del salón cuyas dos superficies se levantan a modo de pupitre. La causa: el ploter se sitúa en cubierta y desde el interior basta con bluetooth y una tableta para disponer de toda la información.
Maniobra y trimado de velas fácil
También los veleros se dotan de joystick de ayuda a la maniobra: al 360 Docking de Jeanneau, el Dock&Go de Bénéteau, se añade el Trim Control de Bavaria de ayuda a las viradas tanto de mayor como de foque. También cada día más barcos equipan los nuevos winches de cazado y amollado eléctrico, al igual que ya diseñan la mesa de la bañera con soporte y espacio especialmente dedicado a instalar una pantalla de ploter orientable y visible desde las ruedas de timón, donde se centraliza toda la información.