A tan solo 20 kilómetros de la ciudad de Palma, en la Bahía de Calvià, se encuentra uno de los puertos más modernos del Mediterráneo. Diseñado por Philipen Stark es una base de referencia para yates de pequeña, mediana y gran eslora, por sus servicios pero también como referente entre la oferta lúdica y gastronómica de la isla.
Además de los servicios específicamente náuticos, en los 3.000 m2 de sus instalaciones tiene lugar a lo largo de todo el año eventos deportivos como la Island Race, la Mallorca Classic Week, musicales como el Port Adriano Music Festival, o comerciales como el Aftersun Market y gastronómicos como el Street Food Festival, que celebra ya su catorceava edición, o la feria del vino que celebrará este año su primera edición.
Creado en 1974 y ampliado en 2011, su estratégica situación en la costa sudoeste de Mallorca , es una de las pocas marinas capaces de albergar yates de hasta 100 metros de eslora y dispone de dos zonas comerciales que el pasado año e remodelaron para unirlas mediante un amplio paseo junto a los barcos.
Por otra parte, debido a la gran demanda de amarres en Mallorca en verano, Port Adriano ofrece de junio a septiembre el primer servicio de marina seca de la costa suroeste de la isla, con almacenaje en tierra, varada y botadura.
Los armadores o capitanes que decidan hacer escala en Port Adriano o establecer en ella su base principal disponen, además de los comercios y restaurantes de todo tipo, de gimnasio para tripulación y clientes, repostaje de combustible en el amarre, banco, supermercado, escuela de buceo y de vela, lanzadera para tripulación, varadero técnico y local para eventos deportivos, corporativos o de moda.