En la actualidad, es cada vez más común el ver sistemas domóticos o inteligentes en el llamado internet de las cosas en todos los ámbitos, pero en la Nautica este cambio no se ha empezado a producir hasta hace muy poco. Iván Jordá
C Zone no ha venido a inventar la rueda, es un sistema de domótica que lleva en el mercado más de diez años, pero es ahora cuando ha adquirido una filosofía de trabajo muy diferente, que solo busca la máxima simplicidad.
No hace mucho, los sistemas domóticos se reservaban a los grandes yates, donde se instalaba un costosísimo PLC de tipología industrial, con pantallas gráficas dedicadas a ello y todo realizado a medida y personalizado.
El inconveniente de estos sistemas era cuando surgía un problema o se necesitaba realizar alguna modificación del mismo, lo que obligaba a recurrir a la empresa que realizó la programación para poder efectuar las modificaciones o reparaciones pertinentes. Aunque esto no pueda parecer un problema, a priori sí convierte en un gran inconveniente si la empresa desaparece o el barco se encuentra muy alejado del punto de servicio.
En este caso, cualquier servicio técnico Mastervolt dispone de una formación específica para los sistemas de C Zone, lo que significa que solamente en España hay más de 40 puntos repartidos por toda la costa que pueden dar soporte y asistencia. Y a nivel mundial existen más de 300 puntos repartidos por todo el globo.
NMEA2000 el eje central del barco
La popularidad del NMEA 2000 es indiscutible, ya que es el estándar más extendido y permite que la mayoría de los equipos de marcas distintas puedan trabajar y comunicarse entre sí. El sistema domótico de C Zone se basa en este estándar, por lo que, si disponemos a bordo de una red compatible con el protocolo NMEA2000, es tan sencillo como añadir los módulos que se deseen a la red, lo que permite que todo el sistema se pueda comunicar y compartir la información entre los distintos equipos que lo integran.
C Zone es actualmente compatible con la mayoría de las marcas de electrónica: Raymarine, Garmin, Navico, Furuno, etc., lo que evita que se deba adquirir una pantalla adicional para controlar la domótica de a bordo ofrecida por C Zone.
La sencillez como máxima
Actualmente, en muchos automóviles, cuando uno se próxima éste desbloquea las puertas automáticamente, enciende las luces de cortesía, y se prepara para circular, sin tener que accionar interruptor alguno.
De la misma manera que nuestro vehículo se ha convertido en “inteligente” adoptando esta tecnología, en la náutica esto es muy reciente. Y aquí es donde surge C Zone, una herramienta que permite simplificar el sistema eléctrico del barco de la forma más natural y sencilla posible, para poder controlar hasta el último sistema de a bordo.
Un ejemplo práctico
Sistema tradicional. Llegamos a nuestra embarcación dispuestos a navegar. En primer lugar, acudiremos a los desconectadores de baterías, para conectar los diferentes bancos y empezar a trabajar en “arrancar el barco”, bombas de sentina, comprobación de niveles, verificación de sistemas, encender electrónica, y un largo etc.
Sistema C Zone. Llegamos a nuestra embarcación dispuestos a navegar, utilizamos nuestro mando a distancia al llegar, y el sistema entra en el modo puerto atendido, encendiendo automáticamente todo lo necesario y realizando una comprobación de sistemas automático, si queremos navegar, activaremos el modo navegar, configurando todo el sistema eléctrico automáticamente.
Si durante la navegación se hace de noche, el sistema cambia automáticamente al modo “navega noche”, adaptándose al nuevo entorno sin que el usuario tenga que recordar encender por ejemplo las luces de navegación o de steaming.
Seguridad
Una pregunta bastante habitual es la referente a la seguridad, y que ocurre si el “sistema” no funciona.
La triple redundancia:
- El sistema avisa mediante mensaje escrito en la pantalla en caso de que detecte un fallo, por ejemplo, el sistema intenta encender las luces de navegación, y estas no funcionan (luz fundida) avisando al usuario de este suceso, registrando hora y fecha en que se comunicó.
- El sistema es autorredundante, y en el improbable caso de que un módulo se averíe, el resto del sistema sigue funcionando sin que le afecte, una vez se reemplaza el módulo afectado, el sistema se reconfigura automáticamente sin necesidad de que tenga que intervenir un técnico, volviendo a estado operativo en pocos segundos.
- Todos los módulos cuentan con un sistema mecánico que permite hacer un bypass y encender las cargas en caso de que el módulo haya perdido la comunicación o este averiado. Además los módulos se pueden programar para que en caso de pérdida de comunicación automáticamente enciendan o apaguen cargas, evitando problemas averías.
Nota: El autor es director del servicio técnico de Azimut Electronics.