El Sunbeam 22.1 es el más pequeño de la gama del astillero austríaco. Es brioso, atrevido y con un volumen interior propio de esloras mayores, en el que podrían pernoctar hasta cuatro personas. Sus medidas y acondicionamientos permiten transportarlo en un remolque y navegar más allá de su zona habitual.
Autor: Diego Yriarte
Fotos: Diego Yriarte / Sunbeam Yachts
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El Sunbeam 22.1 es el benjamín de una laureada familia con varias nominaciones en el European Yacht of the Year. Es un barco de apenas 6,70 m de eslora y con una manga de 2,49 metros, que lo lleva al límite del transporte por carreta. Pero es gracias al acertado aprovechamiento del espacio que brinda un volumen interior mucho mayor que sus antecesores de la misma eslora. Las líneas exteriores son consecuentes con la amplitud de manga, reducción de superficie mojada y mayor eslora dinámica que permite aprovechar al máximo vientos ligeros. El aparejo acompaña en formas y materiales, siendo sencillo pero efectivo. Por todo ello, el Sunbeam 22,1 puede ser una buena opción para quienes se inicien en regatas, pues es posible navegar con dos o tres personas a bordo con comodidad.
Las líneas de casco son actuales, de probada eficacia y propician un volumen interior amplio.
Uso polivalente
Sunbeam Yachts ha concebido una embarcación que, en una eslora reducida de menos de 7 metros, puede ofrecer un abanico de posibilidades de uso muy amplio. Las líneas de casco son actuales, de probada eficiencia y coinciden con la necesidad de un volumen interior amplio. De hecho, cabe la posibilidad de pernoctar en él. Hasta cuatro personas podrán hacerlo en litera, por lo que el plan de navegación puede ser más extenso que el de un mero daysailer. La clave de todo es la manga. La relación con respecto a la eslora es muy elevada y esta relación se traslada al espacio habitable, tanto en cubierta como en el interior. Por otra parte, la manga de 2,49 m es el límite legal para el transporte por carretera.
La posibilidad de cargar el barco en un remolque abre un sinfín de opciones para descubrir la navegación en otras zonas, incluso en aguas interiores para las cuales no habrá limitación, si, como en este caso, equipa un motor eléctrico.
Gracias también a la manga, la bañera es generosa en espacio, evidentemente considerando una tripulación de cuatro personas, aunque la certificación permite hasta seis personas en categoría C.
La opinión de N&Y
Diseño
Habitabilidad
Maniobra
La maniobra es sencilla. No son necesarios el backstay, las burdas, ni siquiera winches para el génova, mientras que un pequeño botalón extraíble será suficiente para establecer el gennaker o spinnaker asimétrico.
El Sunbeam 22.1 incorpora un conjunto de soluciones interesantes. Por lo que, una vez en puerto, la puesta a son de mar será rápida y se podrá soltar amarras sin muchas complicaciones.
Monovolumen
Al descender un único escalón, la perspectiva parece aumentar el volumen interior, gracias también a que la manga máxima se sitúa muy a proa. La sensación es agradable, un conjunto de líneas rectas que confluyen hacia la proa y que dan forma a una simetría desde la que se dibujan sendos estantes, literas laterales y el triángulo de proa. La ausencia de mesa acentúa esta sensación y libera el espacio físico, solo interrumpido por la caja de orza. No es que carezca de mesa, la hay, pero no es fija. Un herraje articulado permite soportar un tablero alrededor del cual pueden sentarse cuatro personas y compartir una comida. Por otra parte, esta misma mesa puede instalarse en la bañera, todo depende de las condiciones climáticas.
El Sunbeam 22.1 incorpora un conjunto de soluciones interesantes, entre las que destaca la posibilidad de transportarlo por carretera.
Las diferentes soluciones a la demanda de espacio de estiba son funcionales, como el contenedor de botellas situado debajo de los asientos y de rápido acceso desde el exterior. Como opcional, cabe la posibilidad de instalar dos armarios para separar las literas de la cama triangular e incluso instalar una nevera portátil.
El interior ofrece la habitabilidad necesaria para iniciarse en la navegación a crucero. De hecho, el nuevo Sunbeam 22.1 es una excelente plataforma para descubrir diferentes áreas de navegación, pernoctando a bordo incluso un par de noches.
Hazlo fácil
Durante la jornada de prueba de navegación, las condiciones del viento no acompañaron como hubiéramos deseado. Hubo una brisa entre 2 y 6 nudos, suficiente para llegar a la conclusión de que su comportamiento en calma es muy correcto. Aunque no es un barco ligero para su eslora, su construcción es robusta, con un desplazamiento que es casi el doble que el de un barco de regata de su misma eslora. Esto se agradecerá a la hora de navegar con más viento y con ola, pues no hemos de olvidar que estamos ante un barco de 6,70 m de eslora y en ceñida será necesario negociar con habilidad cada ola.
La maniobra es muy sencilla pero bien dimensionada. La ausencia de backstay permite que la mayor tenga más superficie, particularmente aprovechada en el tope que acaba recto. Este formato de vela es más efectivo con vientos ligeros y en portantes, mientras que los sables forzados mejoran la forma y facilitan el trimado, también el plegado a la hora de arriar.
En proa se ha optado por un génova con un solape mínimo sobre la mayor. Al ser un aparejo fraccionado, la dimensión del foque es perfectamente maniobrable incluso sin winche. Los dos winches situados en el techo de la cabina se utilizarán para las drizas y para la escota del gennaker o spinnaker. En este caso, la maniobra se completará con un pequeño botalón de aluminio que se instala en un herraje en proa y pasa por un aro que forma parte del arraigo del estay de proa; de esta forma está perfectamente situado en crujía.
Foco en
Nos fijamos en algunos detalles que merecen ser destacados.
Todo ordenado
En un barco pequeño es fundamental el orden y los espacios destinados a la estiba que, en proa, se resuelven con unos bolsillos laterales.
Soporte a medida
Las botellas rodando por el suelo pueden resultar peligrosas. Esta solución es simple, efectiva y está al alcance de la mano.
Mesa en dos segundos
La mesa se pone o quita rápidamente y el brazo articulado permite acomodarla para sentarse con mayor comodidad.
También en el exterior
La misma mesa del interior se puede montar en la bañera mediante un simple herraje.
Con respecto a los apéndices, está equipado con una orza abatible y un ingenioso sistema que también permite abatir el timón. Por supuesto, esto facilita las condiciones para su transporte en un remolque, pero también permite acercarse a la costa en zonas poco profundas.
Podríamos decir que es un perfecto daysailer, pero el interior es el paso siguiente a un barco de uso diurno, el eslabón entre la navegación de crucero, aunque una parte de la travesía se realice por carretera.
Mercury Avator 7.5
El Sunbeam 22.1 es un barco pensado para transportar por carretera con su correspondiente tráiler homologado y que pesa 1.300 kg. Esto nos aproxima a una idea de un plan de navegación en aguas interiores o en el mar como barco de día y con prudente atención en la meteorología pues es un barco concebido para navegar a vela lo máximo posible y usar el motor para entrar a puerto e ir a la amarra. También es el plan ideal de uso para un motor eléctrico, en este caso el Avator 7,5 de Mercury de eje mediano, que entrega una potencia similar a la de un 3,5 hp térmico. La practicidad salta a la vista, poner y quitar la batería en una maniobra simple y en su transporte no hay posibilidad de derrames ni olores. Para mayor seguridad es recomendable tener dos baterías. El motor completo no es excesivamente pesado para quitarlo y guardarlo en el interior del barco, pero la instalación del soporte articulado la ha de hacer un profesional porque es clave la altura de trabajo del motor. También es muy importante la limpieza del fondo, como lo es para la navegación a vela, solo que en el caso de la navegación en eléctrico el fondo sucio aumenta considerablemente la resistencia y por consiguiente el consumo.
Con la batería al 80 % salimos de la amarra perfectamente y en silencio, que es de agradecer. Hay que considerar que un barco de 1.300 kg es el límite para este motor, así todo, mantiene perfectamente la velocidad de interior de puerto, de 3 kt y le queda un resto de aceleración. Al dejar atrás la bocana de Port Ginesta, con 8 nudos y una insipiente marejadilla, mantuvo correctamente los 4,2 nudos y anunciaba una hora de autonomía. Al volver a la amarra, luego de unas cuantas vueltas y maniobras al 100% de la potencia regresamos a la amara y habíamos consumido un 30% del total.
Características
Eslora total: 6,85 m
Eslora de casco: 6,70 m
Eslora de flotación: 6,62 m
Manga: 2,49 m
Calado: 0,60/1,40 m
Desplazamiento: 1.300 kg
Lastre: 27 %
Sup vélica en ceñida: 28 m²
– Vela mayor con sables: 17 m²
– Gennaker con enrollador: 35 m²
Motorización: Mercury Avator 7.5
Camas: 2 literas, (4 personas)
Certificación CE: C 6 personas
Constructor: Sunbeam Yachts
Importador: Tarraco Yachts
Precio: a partir de 495.000 euros, sin impuestos.
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