Álex Pella: “Intentaré ganar la Ruta del Ron”.El catalán aspira a la victoria de la gran transatlántica en solitario en Open 40 por K. Cusí
Con el flamante trofeo de mejor navegante oceánico español del 2013 concedido por Terras Gaudas bajo el brazo, Álex Pella prepara a fondo su participación en la próxima Ruta del Ron, una de las grandes pruebas del calendario internacional en solitario, y sigue soñando con participar en la próxima Vendée Globe, a ser posible con un proyecto íntegramente español.
“El 2013 fue un año fantástico, no sé si el mejor de mi vida, pero sí muy bueno. Estuve ocho meses navegando, de ellos cuatro con Lionel Lemonchois en el circuito de maxi trimaranes, algo muy difícil de conseguir para un español”, recuerda Pella. “Además, hice un segundo en la Transat Jacques Vabre, con Pablo Santurde a bordo del Tales II, un Open 40 íntegramente diseñado y construido en España” (Marcelino Botín y Longitud Cero Composites, respectivamente).
Con este precedente, el barcelonés afronta la Ruta del Ron (clase Open 40) “superilusionado” y sin ninguna presión, al no tener ningún gran patrocinador al que deba ofrecer un resultado. Ha mejorado aún más el barco, retrasando pesos, y está convencido de poder conseguir la primera victoria española en la que se considera la segunda regata oceánica en solitario más importante del mundo: “A la Ruta del Ron vamos a intentar ganar”, dice sin esconder su ambición. La cita, el 2 de noviembre en Saint-Malo, en la Bretaña francesa. Destino: Pointe-à-Pitre, en la isla caribeña de Guadalupe.
Pella no estará, sin embargo, el próximo 31 de diciembre en la línea de salida de la Barcelona World Race, una regata de vuelta al mundo que empieza y acaba en su ciudad natal y en la que acabó cuarto en la pasada edición. “Para mí es muy triste. Lo he intentado –dice-, he presentado proyectos a la FNOB, pero no tengo barco”.
La Vendée 2016, siguiente objetivo
Por esto, acabada la Ruta del Ron, su gran objetivo se centrará en la próxima Vendée Globe, que quiere correr por encima de todo. A poder ser, con un barco nuevo, en un proyecto similar al Open 40 Tales II “para intentar ganar”; si no es posible, con un barco de segunda mano.
Si puede ir con barco nuevo, tiene claras sus opciones, que pasan por un equipo íntegramente español, desde el diseño a la construcción, pasando por las velas (usa velas North diseñadas por Juan Messeguer), puesta a punto y todos los miembros de su equipo.
En cuanto a las opciones técnicas del diseño, Pella se muestra un tanto conservador. No apuesta por un barco con foils, pese a que esa parece ser la gran apuesta de los barcos imoca que se construirán en los próximos meses. “Tengo la sensación de que en el tema de los foils me he quedado un poco fuera, porque no he navegado en moth. Además, me gustan las cosas sencillas. Yo opto por temas clásicos, pero muy simplificados, más que buscar cosas revolucionarias”.
Apoyar la industria española
En los últimos meses, Pella ha dado a conocer su proyecto a nivel institucional; ahora empieza a promocionarlo a nivel comercial, en busca de patrocinadores. Según la respuesta que consiga, optará por un proyecto más ambicioso o deberá conformarse con una participación más modesta.
El navegante barcelonés está convencido del potencial de la industria náutica española. Su experiencia en la pasada Transat Jacques Vabre con el Tales II le reafirma en su punto de vista: “A la llegada a Brasil todas las grandes figuras vinieron a ver el barco; se interesaron por detalles del diseño y de la construcción, hasta el punto de que Jean-Pierre Dick contactó con Longitud Cero para analizar la posibilidad de construir su nuevo imoca en España. El potencial es enorme, lo que pasa es que no ves barcos navegando por las costas del país.”
Otro aspecto de la vela española que no le gusta es la mala imagen que tiene: “Se asocia a gente de dinero, pelotazos y demás. Hay que cambiarlo por una imagen de deporte sano, ecológico, etc. Estos últimos meses me he movido mucho por el Ministerio de Industria y la Dirección General de la Marina Mercante hablando precisamente de esos temas, de la forma de potenciar una industria náutica que valoramos poco y de mejorar la imagen del sector”.
Además de su participación en la Ruta del Ron y de su ilusión por estar en la línea de salida de la próxima Vendée Globe, en noviembre de 2016, Pella espera inaugurar un Centro de Navegación de Altura en Dénia, donde reside y que espera que prospere paralelamente a su carrera deportiva.
Para el 2015, su gran regata será la Transat Jacques Vabre, regata transatlántica a dos, en la que en 2013 quedó segundo en Open 40. Lo que no está claro es si participará nuevamente en esta clase o ya dispondrá de un imoca.