La emblemática gama Swift Trawler de Bénéteau añade su mayor eslora, esta 62 Grand Trawler. Un gran crucero de semidesplazamiento de casi 19 metros de eslora con todos los detalles de confort imaginables en un apartamento flotante de estas dimensiones. Un barco destinado a los amantes de slow cruising, capaz de ofrecer una autonomía de hasta 900 millas a un régimen de 9 nudos equipado con dos motores Man de 730 Hp con ejes. Potencia, sin embargo, que le permite alcanzar una máxima de hasta 20 nudos con el gas a fondo.
Firmado por el estudio de arquitectura naval Micad, este casco de desplazamiento se ha desarrollado para obtener la máxima la autonomía y eficiencia. “Si las formas externas son simples y elegantes, la realidad es que técnicamente todo fue mucho más complejo. Tomó 300 horas cálculos y pruebas para diseñar el casco, y esto garantiza que el Grand Trawler 62 sea del 35% más eficiente y económico que cualquier otro yate similar”, comenta Robert Chaffer, director de producto de Bénéteau.
El verdadero lujo contemporáneo también es el espacio. Fruto de una nueva colaboración entre Bénéteau y el estudio de diseño italiano Nauta, el Grand Trawler 62 ofrece volúmenes impresionantes a la vez que ha implementado un completo sistema de control y optimización de todas las instalaciones, diseñado para travesías largas, que garantizan el bienestar de los ocho pasajeros.
Las dimensiones del flybridge lo convierten en uno de los mayores del mercado en esta eslora, donde destaca un gran sofá en forma de U para acomodar hasta a ocho invitados alrededor de la mesa.
En la planta superior se distribuyen un salón junto a la entrada, que se complementa con el de la bañera; la cocina junto al comedor, y el puesto de gobierno. Desde aquí se tienen dos accesos, uno por popa a la cabina de marinería y otro junto al puesto de gobierno a la zona de noche, donde se hallan tres cabinas dobles con sus respectivos aseos, siendo las del armador la que ocupa, a toda la manga, el espacio a media eslora.
Su precio se sitúa a partir de 1.384.000 euros, sin impuestos.
