El sector de construcción de embarcaciones de recreo forma parte de esos nichos industriales cuya realidad se ha dejado ver poco en España, todavía. La visibilidad de las empresas que constituyen la industria náutica, su impacto económico, el empleo que generan y su contribución a la marca España se ha gestionado históricamente de forma muy tímida en nuestro país.
En un sector eminentemente masculino, hay compañías que están rompiendo con esta tradición, por una parte, porque la evolución social lo impone, el momento del relevo generacional llegó a las empresas familiares del sector hace unos años y se está consolidado. Por otra parte, ”el perfil de las consumidoras y consumidores se está transformado, usuarias y usuarios cada vez más jóvenes se asoman a la náutica de recreo y para identificarse con su sensibilidad, sus valores y sus necesidades es necesario estar en su mismo plano vital y experiencia”, explica Ione Astondoa, directiva de Astilleros ASTONDOA, el único Astillero español de yates de lujo con más de 100 años de historia en cuya gestión ya participa la cuarta generación de la familia originariamente propietaria.
La dirección de ASTONDOA ha estado integrado por hombres durante tres generaciones, pero ha sido en la cuarta cuando ha irrumpido el talento femenino de la mano de Ione Astondoa -hija del actual CEO, Jesús Astondoa-, convirtiéndose en la primera directiva mujer en el Astillero. Ella, a sus 27 años, interviene en marketing y comunicación del Astillero así como en la gestión de costes y RRHH.
Otra mujer de la familia ASTONDOA, Laura García Astondoa, viene participando también en proyectos desarrollados en el ámbito de la imagen del Astillero. También muy joven y todavía completando su formación, se espera que Laura se implique más, al terminar sus estudios, en el Astillero donde sus conocimientos y aptitudes ya están presentes.
ASTONDOA comenzó un nuevo capítulo en su historia en 2016, a partir del momento en que cumplió su centenario, y en el que la tripulación de la empresa empezó a abrirse a la feminización y al talento joven. En el “puente de mando de sus yates” entraron ya tripulantes con un perfil distinto, entre ellos Ione Astondoa, en 2019, quien comenzó a imprimir un giro de 360º en la estrategia de marketing y comunicación de la compañía. “Una marca que refleja el “know how” puramente español de la industria náutica de lujo necesitaba adaptarse al marketing digital a nuevas formas de comunicar que desde el plano experiencial buscan despertar emociones de las que la sociedad, y especialmente las mujeres, están deseosas sobre todo en este contexto marcado por la pandemia”, asegura.