Por primera vez en casi 20 años, regatistas españoles parten entre los favoritos de la próxima Mini-Transat y podrían igualar o incluso superar los dos podios conseguidos por Álex Pella en la primera década de este siglo.
Autor: Kiku Cusí
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Los resultados logrados en las regatas de esta temporada invitan al optimismo, especialmente en los casos de Carlos Manera y Federico Waksman (uruguayo formado en la Base Mini Barcelona). Y también Djamila Tassin suele estar en el grupo de cabeza entre los barcos de serie, sin olvidar al incombustible Miguel Rondón y a Fede Norman.
Los cuatro primeros, además, ya saben lo que significa esta popular transatlántica en solitario, que este año se corre en el recorrido de 4.050 millas entre Les Sables d’Olonne-La Palma-Guadalupe.
En la clasificación del conjunto de la temporada, Carlos Manera es primero y Waksman tercero, en prototipos, mientras Tassin es segunda en barcos de serie.
Esta próxima Mini-Transat se prevé especialmente competida, tanto en barcos de serie (que viven un auténtico boom desde hace varias ediciones) como en prototipos. Por primera en años, hay nuevos diseños de diversos arquitectos y podría hablarse de casi una docena de patrones que optan al triunfo.
Entre ellos figuran, evidentemente, Manera y Waksman, el primero en un diseño Manuard con foils, y el segundo con uno de los ocho Raison, que se han impuesto en las últimas tres ediciones. El barco más rápido, sin embargo, es elNicomatic de Caroline Boule, otro diseño Manuard que, a diferencia del Xucla de Manera, dispone también de flaps en el timón, lo que le permite volar plenamente. Si la regata se decide por velocidad pura, tiene muchas opciones de ganar; pero si surgen complicaciones meteorológicas y tácticas, hay otros aspirantes com más experiencia que se pueden llevar el gato al agua.
Waksman fuerza el ritmo
En la última regata anterior a la Mini-Transat, la Puru Transgascogne entre Port Bourgenay-Getxo-Port Bourgenay, Waksman se impuso con claridad, pese a una penalización de una hora por haber perdido la mitad de su bidón de agua de emergencia en la primera etapa. Por ello, el uruguayo afincado en Barcelona forzó el ritmo de su Repremar Logistics(un diseño Raison que ganó la Mini-Transat 2021) en la segunda manga:
“Después de lo que parecía ser el último frente que venía ya apuntando a rumbo y con buena velocidad vi que me podía separar del segundo y tercer barco, que no los veía casi en el AIS. Empecé apretando con el espí y así aproveché a exigirle más al barco y poner un poco más de distancia. Ahí la verdad fue duro porque me degasté, traté de generar esa distancia a puro timón, pero me fue bien, lo logré y ya después fue aumentando el viento y acabé de posicionarme. Por fin, sin protestas de por medio, no como en la primera etapa, gané. ¡Estoy supercontento, la verdad!”
Carlos Manera, en cambio, se vio forzado a abandonar en la primera etapa, tras romper el anclaje inferior de su timón de babor del Xucla. “Lo rompí en una ceñida abierta, con unos 20 nudos de viento y cuando estaba ya foileando a 12-14 nudos de velocidad. Tras romperse el anclaje, el timón también cedió, igual que la barra que tengo para trimarlo. Ya tenía previsto cambiar la pieza que causó la rotura, pero aún no me había llegado el recambio”, comentó Manera.
En esta Transgascogne Rondón-Norman lograron la tercera plaza en barcos de serie a dos a bordo del Kristina, mientras Tassin acabó quinta con el Antistene en la categoría solitario en barcos de serie.
Mientras tanto, en el Mediterráneo, Hugo Ramón prosigue su preparación con su Verdhugo de cara a la Mini-Transat 2025 imponiéndose en la Massilia Cup, de 500 millas en solitario, entre Marsella-Córcega-Marsella. El navegante balear se ha propuesto participar en su cuarta transatlántica en solitario para conmemorar el vigésimo aniversario de su primera.
