Thomas Coville no es de los que se quedan a medio camino ni renuncia fácilmente a sus objetivos. Tras romper un timón y verse forzado hace unos meses a abandonar su intento de batir el récord de la vuelta al mundo, está modificando su maxitrimarán Sodebo para volver a intentarlo y conseguir que sea el primer barco que complete una circunnavegación en menos de 40 días.
Para conseguirlo, trabaja sobre todo en tres campos: unos alerones y unos timones más grandes y resistentes que le permitan volar con un viento de tan solo 12 nudos, el software de sus pilotos automáticos y la detección de objetos flotantes no identificados (ofnis), seguramente uno de los mayores peligros de estos barcos capaces de medias superiores a los 40 nudos.
En una rueda de prensa virtual (pandemia obliga), Coville recordó su apuesta por una tecnología revolucionaria y la confianza en su equipo, que llevó a la concepción de un barco muy distinto, con la cabina delante del mástil. “Creo en el trabajo de equipo y solo sirve lo mejor, hasta en los más mínimos detalles.” Y esto en todos los aspectos relacionados con la navegación, desde la estructura del barco a la ropa de la tripulación, que también mejoró en colaboración con Helly Hansen.
“Quiero que mi barco sea el primero en dar la vuelta al mundo en menos de 40 días, de la misma forma que mío fue el primero en dar la vuelta al mundo en menos de 50”, aseguró el francés. A su entender, la clave para conseguirlo es mejorar su rendimiento por debajo de los 14 nudos de viento, condiciones en las que ya consigue volar regularmente. “En mi última vuelta al mundo, nunca tuve menos de 10 nudos de viento”, explicó. “Lo importante no es poder navegar a más de 50 nudos, sino de hacer medias de 40 a 42 nudos.” Y ser más rápido en las zonas de transición, para no quedar atrapado cerca de los anticiclones y llegar a “alcanzar los sistemas meteorológicos que tenemos delante”.
Según aseguró, hasta ahora con un viento de 14 nudos navegaba a 28 nudos, velocidad en la que empezaba a volar. A su juicio, mejorar este punto es esencial para bajar de 40 días en dar la vuelta al mundo. >> K. Cusí
Thomas Coville, la navegación de altura en las venas
Nacido en mayo del 68, el bretón Thomas Coville es un navegante de altura especialista tanto en navegación en solitario como con tripulación, con un extenso palmarés a sus espaldas.
Ha participado y finalizado las regatas de altura más competitivas del mundo, incluidas la Mini Transat 6.50, la Solitaire du Figaro, la Admiral’s Cup, la America’s Cup y la Vendée Globe.
En la actualidad es el patrón del nuevo Ultime Sodebo 3, un trimarán con el que ha batido récords y superando límites. En 2016, logró dar la vuelta al mundo en solitario en un multicasco en menos de 50 días (49 días y 3 horas), una hazaña que logró tras haber batido el récord de cruce del Atlántico Norte (4 días, 11 horas, 10 minutos) en el Ultime Sodebo también en solitario.
Además, en 2012 ganó la Volvo Ocean Race con el Groupama y tiene en su haber ocho circunnavegaciones (4 en solitario y 4 con tripulación) de las que seis en multicasco y dos en monocasco Imoca y VOR70.
Top oceánico Aegyr de Helly Hansen, pensada por profesionales, hecha para navegantes
La marca con sede en Noruega trabaja en estrecha colaboración con profesionales para desarrollar equipos que satisfagan sus necesidades en términos de rendimiento y protección, y la Ægir Ocean Modular Smock Top es su último y galardonado desarrollo que ofrece protección impermeable en un diseño modular, que puede adaptarse a las condiciones cambiantes.
Diseñado, desarrollado y probado en colaboración con Thomas Coville, el Ægir Ocean Modular Smock Top está construido con una capucha y cuello extraíbles, cremallera y ventilación de doble apertura.
A medida que los barcos modernos de regatas oceánicas se dotan de cabinas más protegidas, los profesionales necesitan prendas de protección que se adapten al lugar en el que se encuentran y por tanto a condiciones muy cambiantes. Estas condiciones el navegante puede requerir tres chaquetas separadas para funcionar en regata: una más larga, otra más corta y otra con capucha. Con su diseño modular, el Ægir Ocean Modular Smock Top los combina en una sola pieza que minimiza la cantidad de prendas necesarias sin comprometer la funcionalidad y la protección.
Mientras que la ventilación de doble apertura permite una regulación óptima del calor las dos cremalleras impermeables YKK AQUASEAL de grado de traje seco están estratégicamente colocadas para bombear aire hacia adentro y hacia afuera, brindando la máxima ventilación sin tener que quitar la parte superior del top mientras se trabaja en los grinders.
Construido con tejido Helly Tech Professional, el Ægir Ocean Modular Smock Top ofrece una impermeabilidad y transpirabilidad extremas en una construcción de 4 capas. Los sellos de látex ajustados en el cuello y las muñecas garantizan que no entre el agua, mientras que las cremalleras YKK AQUASEAL totalmente impermeables utilizadas para la ventilación de doble lado garantizan una protección impermeable incluso en condiciones extremas.
La nueva Ægir Ocean Modular Smock Top, lanzada esta primavera, ha merecido ya el German Design Award 2021 en la categoría de Excelencia en el Diseño de Producto.
>> www.hellyhansen.com