La Mataró Marina Barcelona para superyates acogió el pasado mes de noviembre un encuentro de capitanes, tripulaciones, industriales y personal vinculado al mundo de los barcos de gran eslora organizado por Varador 2000.
La cita reunió a más de ochenta apasionados del mar y la náutica que pudieron conocer de primera mano los nuevos proyectos de la empresa y pasar un buen rato entre amigos mientras degustaban una sabrosa barbacoa. La intención de la empresa es que el encuentro se repita periódicamente.
Esta primera Crew Party organizada por Varador 2000 coincide con el primer aniversario de la puesta en marcha de la Mataró Marina Barcelona, el amarradero para barcos de gran eslora que gestiona Varador 2000 en el muelle de poniente del puerto de Mataró. Esta dársena para superyates se encuentra situada en un lugar estratégico de la costa del Maresme, a escasos kilómetros de la capital catalana. Un lugar tranquilo y con una calidad de servicios y seguridad de primera línea que además ofrece los precios más competitivos del mercado en toda el área marítima de Barcelona para largas estancias de barcos.
Durante el primer año de funcionamiento de esta marina han invernado 25 barcos (repartidos en diferentes periodos), el doble de los previstos inicialmente, cuando entró en funcionamiento la instalación. El 80% de estos barcos de gran eslora son extranjeros, principalmente de bandera inglesa o de países de la Commonwealth y algunos sudamericanos. Para la segunda temporada de invernada que acaba de empezar las previsiones son bastante optimistas. Varador 2000 ha promocionado internacionalmente dicha marina en las ferias y certámenes más importantes (Mónaco, Génova, Southampton, etc.). Fruto de esta labor se han captado nuevos clientes, se ubicado a la ciudad de Mataró y su puerto en el mapa náutico internacional y se ha consolidado la posición de la empresa dentro del sector.
Actualmente la Mataró Marina Barcelona se encuentra al 80 % de ocupación, habiendo confirmado una estancia fija 15 embarcaciones, que invernarán permanentemente toda la temporada. Las previsiones indican que otras 15 embarcaciones de gran eslora también atracarán en este amarradero durante periodos de invernada más cortos. La marina también acaba de estrenar la invernada para barcos en marina seca. El nuevo dry dock ya acoge un par de catamaranes y un monocasco que cohabitará durante unos meses con el resto de superyates que amarran en el agua.