Trucos crucero práctico by Albert Puerto
CABULLERÍA
Nudos por seno
En el escueto inventario de nudos contemporáneos, descontadas las ligadas y embutidos, se pueden listar una docena, la mitad de ellos imprescindibles (llano, rizo, as de guía, simples -cotes-, vuelta mordida, ballestrinque y vuelta de rezón). Muchos de estos nudos pueden terminarse por seno, asegurando el desazocado. Un nudo terminado por seno permite deshacerlo con mucha más facilidad, por lo que el nudo original adquiere nuevas características. Y es esta misma característica positiva la que también actúa, en mucho menor grado, en su contra, pues puede conllevar algún riesgo de desazocado accidental. Se pueden citar varios casos. El nudo llano terminado por seno pasa a denominarse rizo. Es el nudo aconsejado para los matafiones de una vela encargados de aferrar el trapo sobrante tras la reducción de superficie vélica. Al largar rizos este nudo se deshace sólo tirando del chicote del seno. Otro buen ejemplo es el ballestrinque terminado por seno. El nudo simple pasado por seno se usa para pequeños esfuerzos, también se pasa a veces por seno la vuelta mordida, incluso el as de guía, facilitando el desazocado.
TRUCOS
Lona lateral antirrociones
Cuando la navegación se torna húmeda y fría es aconsejable colocar unas lonas protectoras que se montan entre los candeleros y los pasamanos. Resguardan parte de la bañera del viento frío y repelen los rociones de las olas al chocar contra el casco Deberá tomar las medidas entre los candeleros y las alturas de los cables pasamanos. El trabajo puede encargarlo a una velería o hacerlo usted mismo. De todas formas, es un elemento muy sencillo de hacer y económico, que sabrá valorar navegando en invierno, con viento o en malas condiciones del mar. Unos sencillos ollaos remachados le permitirán afirmar pequeñas piolas con las que podrá amarrar la lona a los candeleros. Para que tengan más utilidad se pueden coser por la parte interior bolsillos o bolsas para estibar linternas, ropa, gafas de sol, comida o bebida, sin que vayan viajando por el suelo de la bañera, tropezándose todo el mundo con ellos.
PRIMEROS AUXILIOS
Botiquín y manual
La normativa obliga a tener a bordo un botiquín de primeros auxilios en todo tipo de embarcaciones categorizado según el tipo de navegación. Es muy recomendable (y en ocasiones obligatorio) tener a bordo un manual de primeros auxilios. Diríjase a una buena librería, mejor si es especializada en temas náuticos, para adquirir un manual de este tipo. En él encontrará soluciones sobre los distintos casos de accidentes y enfermedades que se puedan producir a bordo. Golpes, magulladuras, traumatismos, mareos, indigestiones, cortes, enfermedades comunes y también buenos consejos en casos de accidentes o patologías graves. En los momentos de dulce aburrimiento, ya sea fondeados en una cala o atracados en puerto, es aconsejable leer el manual para familiarizarse con los recursos necesarios en primeros auxilios, así como conocer el propio manual. No estará de más comprobar la caducidad de los medicamentos.
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