Red de satélites Galileo
Comienzan las pruebas de la segunda generación
El primer hardware de los satélites Galileo de segunda generación ha comenzado a ser sometidas a evaluación por Airbus Defence and Space en sus instalaciones de Ottobrunn en Alemania y por Thales Alenia Space en el centro técnico ESTEC de la Agencia Espacial Europea-ESA en los Países Bajos. Aquí se prueban las antenas en una gran cámara anecoica utilizada para probar antenas espaciales de 1 m de diámetro o menos, o bien pequeños satélites enteros, y está protegida contra la radiación electromagnética externa, mientras que sus paredes interiores están cubiertas con espuma no reflectante en forma de pirámide para absorber señales y evitar reflejos no deseados, imitando el espacio infinito.
Las nuevas cargas útiles de navegación diseñadas por las dos empresas están siendo sometidas a pruebas de sus respectivas antenas de navegación para acreditar que cumplen con los ambiciosos niveles de rendimiento establecidos para la próxima generación del sistema de navegación por satélite de Europa.
La ESA ha firmado dos contratos por un importe total de 1.470 millones de euros para diseñar y construir el primer lote de la segunda generación de satélites de navegación Galileo de Europa. Los contratos se han adjudicado a Thales Alenia Space (Italia) y Airbus Defence & Space (Alemania) para crear dos familias independientes de satélites que suman un total de 12 satélites Galileo de segunda generación.
Galileo es la constelación de navegación por satélite mundial civil de Europa, actualmente el sistema de navegación por satélite más preciso del mundo, que ofrece una precisión de escala de metros a más de dos mil millones de usuarios en todo el mundo. Con una precisión mejorada, la nueva generación debería poder ofrecer posicionamiento de precisión a escala decimétrica.
Estos satélites Galileo de segunda generación (G2) revolucionarán la flota de Galileo, uniéndose a los 26 satélites de primera generación ya en órbita con un primer lanzamiento a finales de este año.
El European Data Relay System o EDRS, apodado “Space Data Highway” por su operador Airbus, utiliza tecnología láser para reducir el tiempo necesario para que los satélites de observación de la Tierra transmitan información al suelo.
Los satélites G2 se unirán gradualmente a la constelación existente, pero serán mucho más grandes. Utilizando propulsión eléctrica por primera vez y alojando una antena de navegación mejorada, sus cargas útiles totalmente digitales están siendo diseñadas para reconfigurarse fácilmente en órbita, lo que les permite responder activamente a las necesidades cambiantes de los usuarios.