Gran autonomía, buen comportamiento a bajas velocidades y libertad de navegar rápido cuando sea necesario. He aquí los tres ejes sobre los que descansa el concepto del nuevo Magellano. DOLORS PINART
El Magellano 76, el último modelo presentado y también el mayor de la gama que el astillero italiano Azimut inició en 2009 y que cuenta ya con cuatro modelos en el agua. El 76 es la evolución y actualización del modelo de 74 pies al que aventaja solo en menos de un metro de eslora pero con un resultado en términos de volumen, habitabilidad y distribución notables. Esto se hace especialmente evidente en lo que se refiere en el equilibrio en la distribución de los espacios de a bordo, y en la separación de las áreas de tripulación y estiba de las dedicadas al armador y sus invitados.
Las líneas externas, obra de Ken Freivokh, son bien reconocibles por la roda vertical, la pureza de las líneas, la verticalidad y amplitud de las cristaleras que circundan la superestructura y la armónica integración del flybridge en el conjunto, cuyo techo rígido, muy aéreo, es parte esencial del diseño desde un punto de vista estético.
Sin embargo, valores formales aparte, este 24 metros –como el resto de la gama- destaca por el especial diseño de la carena creada por Bill Dixon, una carena de semidesplazamiento que el astillero denomina DualMode, y que presenta formas redondeadas en la zona de la quilla, volumen en proa, arista viva en la línea de flotación y un ángulo de carena en popa de solo 8,2º lo que favorece el asentamiento y redunda por tanto en confort en navegación.
La proa recta y ancha es ideal por otra parte para el crucero a bajas velocidades -10/11 nudos- , mientras que los largos redanes longitudinales proporcionan sustentación y permiten que el casco alcance el semiplaneo a altas velocidades.
Nos encontramos pues con un barco creado para navegar confortablemente a velocidades de crucero tranquilo de 12-15 nudos y menos y en cualquier condición de mar, toda vez que puede alcanzar velocidades de hasta 22 nudos —su velocidad límite—cuando la situación así lo requiere o la prisa nos empuja.
Si a esto le añadimos su elevada autonomía, que alcanza aproximadamente las 550 millas a velocidad de crucero de 15 nudos con un consumo de unos 200 l/h, pero que a nueve nudos puede alcanzar las 1.500 millas con un consumo de 46 l/h, queda claro que nos encontramos ante un crucero destinado a las navegaciones largas con absoluta tranquilidad.
Interior
Realizado por el gabinete de diseño del propio astillero, dirigido por Alessandro Pulina, el interior del Magellano 76 responde a un sencillo criterio: se trata de navegar, sí, y lejos. Pero el barco en que lo hacemos debe ofrecer las mejores condiciones para hacerlo a pleno confort. Hasta hoy teníamos dos tipologías de barcos que respondían a este criterio, los denominados trawler y las conocidas navettas italianas. El Magellano recoge de los primeros su comportamiento a bajas velocidades y autonomía, y de las segundas su funcionalidad, estilo y habitabilidad. Pero no es una fusión de ambas, sino un nuevo concepto, ya que es definitivamente mucho más rápido que ambas cuando se desea, introduce un estilo claramente italiano respecto a los clásicos trawler y moderniza y sofistica el concepto de yate de crucero de altura.
Para visualizar hasta qué punto el astillero ha sacado partido desde el punto de vista de la habitabilidad a los centímetros de más de que el 76 dispone respecto al 74, no linealmente sino traducidos en volumen, basta fijarse dos aspectos: el espacio ganado en la cubierta inferior, que permite una completa separación entre las zonas destinadas a estar y a los invitados y la destinada a servicio y tripulación, y en la propia distribución de las cabinas.
Respecto al primero, la tripulación dispone de dos entradas, una desde la plataforma de popa, y otra desde la cocina situada en la cubierta principal, de forma que se crean dos recorridos independientes que garantizan la privacidad de los huéspedes en todo momento.
Además, si el armador desea ocultar la cocina a la vista, el astillero puede resolverlo mediante la instalación de mamparos transparentes polarizables, de forma que en ningún caso se perjudica la vista sobre el mar, que es una de las características más notables del diseño de la cubierta principal y de la superestructura del barco.
Respecto al segundo, la habitabilidad en la cubierta inferior, el Magellano destina la mitad de proa del barco a cuatro cabinas dobles con sus baños para los invitados y el armador, y tres cabinas a popa para tripulación además de zona de estar propia y lavandería.
El propietario dispone en el centro del barco de una gran suite con baño y ropero-vestidor, iluminada por grandes ventanales rectangulares en las bandas —parte de las cuales puede abrirse.
La cabina de babor dispone está comunicada mediante una puerta con la cabina principal, de forma que puede convertirse en una cabina anexa con baño propio y una cama que al plegarse se convierte en mesa de forma que el espacio se transforma en un verdadero despacho privado del propietario.
Cubierta principal
El nuevo estilo que le confiere personalidad al Magellano se observa también la zona común de la cubierta principal. Cálido, luminoso gracias a las grandes ventanas perimetrales, confortable y moderno, el salón-comedor está amueblado con un estilo moderadamente náutico, que recuerda el de los clásicos trawlers, haciendo un abundante uso de las pieles y el cuero, y con los mamparos en nogal veteado horizontal.
Cuenta con una larga mesa con capacidad para ocho enfrentada a un sofá a la otra banda con mesillas bajas, mientras que la parte de proa de este espacio se destina a la cocina en U abierta y al puesto de gobierno central con dos asientos ergonómicos individuales, separado de la zona de estar por un mueble bajo que esconde una gran pantalla plana.
Sin duda, el aspecto más notable es la gran sensación de estar en un espacio abierto al paisaje, al mar, en todo el perímetro de la cubierta principal. El logro del diseño es precisamente el haber logrado que no haya barreras visuales ni siquiera las que habitualmente encontramos en otras unidades en las que la visión hacia proa queda obstaculizada por la elevación del puesto de gobierno.
Habitabilidad exterior
El Magellano 76 ofrece, respecto al 74, un flybridge casi un metro más largo, dividido en tres espacios funcionales. A proa el puesto de gobierno superior, en el centro una zona de comedor-estar bien protegida por el hard top y flanqueada por un gran mueble que alberga el grill y las neveras, y una zona más a popa destinada a solárium y equipable con sofás o tumbonas.
A esta extensión del barco también se le saca partido en otras zonas exteriores, como la plataforma de popa, que se alarga en más de 60 centímetros y permite estibar, izar y botar un auxiliar de 3,85 metros de eslora.
En popa, ofrece además un gran espacio que permite instalar una mesa para comidas al aire libre y un gran sofá mirando a proa que usarse también como solárium o sencillamente para echarse a descansar.
En la cubierta de proa, amplia y bien protegida por una borda alta, los invitados disponen también de otra zona de solárium acolchada así como de un sofá mirando a proa para deleitarse en navegación, accesible desde las bandas por unos también anchos y bien protegidos pasillos laterales.
Para navegar siempre
Ya se ha dicho que el concepto del Magellano 74 es el de un barco que permite emprender cualquier tipo de navegación con absoluto confort, gracias precisamente al especial diseño del casco. Pero ello no sería posible sin referirnos a la motorización, equipamiento e ingeniería de que está dotado y que lo convierten un barco absolutamente adaptado y fiable para este propósito.
Equipado con dos MAN de 1.000 caballos, dispone de espacio para instalar estabilizadores, y se entrega con dos generadores Kohler de 20 kW y tres cargadores Mastervolt, uno para grupo de baterías y aire acondicionado con doble compresor y fancoils en cada espacio, y los equipos están montados sobre silentblocs para evitar la transmisión de vibraciones y minimizar el ruido.
En un barco que navegará muchas millas y en muchas ocasiones alejado de los principales centros de asistencia, la autonomía no descansa solo en la capacidad de los depósitos de combustible sino que implica a la ingeniería y a la organización de los sistemas de a bordo. En este sentido, el astillero ha prestado una especial atención a la organización de todo el cableado, los conductos y los sistemas para que sean fácilmente identificables y accesibles tanto para facilitar la inspección como la reparación en su caso.
Características
●Eslora total: 24,40 m
● Eslora de casco: 23,12 m
● Manga: 6,00 m
● Calado: 1,81 m
● Desplazamiento: 64,1 t
● Motorización: 2 x 1.000 Hp (735 kW) MAN V8
● Capacidad de combustible: 7.500 l
● Concepto: Ken Freivokh
● Diseño del casco: Bill Dixon
● Diseño interior: Azimut Yachts
● Constructor: Azimut Yachts
● Importador: Marina estrella
● Categoría CE: A
● Precio: 3.100.000 euros, sin impuestos.
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