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PRUEBA VELA]
Solaris One 44
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con propiedad de su capacidad para
remontar el viento y virar en menos
de 80 grados. También nos agradó su
habilidad para mantener la velocidad
al perder presión cuando abríamos las
escotas, rumbo en el que una carena
rápida pero penalizada por el peso de
la acomodación puede sufrir.
ACOMODACIÓN LUJOSA
Hablando de lo que ofrece El Sola-
ris One 44 en su interior: la versión
probada ofrecía la configuración es-
tándar con dos camarotes de popa ex-
tendidos bajo la bañera y un tercer
camarote, destinado al armador, en
proa.
Este último espacio acoge una gran
cama doble central con cabezal orien-
tado a proa cuya amplitud se debe a
la existencia de un pique de velas, ac-
cesible desde cubierta, muy práctico
y diríamos que imprescindible en un
velero esta filosofía y eslora. Al contar
con buen armario y baño propio do-
tado de ducha, este camarote alcanza
todos los lujos deseables.
La disposición citada incluye el ya
clásico salón central que en este Sola-
ris alcanza grandes dimensiones y una
luminosidad y elegancia encomiables.
Se ven en él unos bancos bien estruc-
turados, muy accesibles y cómodos,
rodeados de estantes de excelente eba-
nistería que dan todavía más empaque
al conjunto.
El sofá de estribor queda cortado
para dar espacio a un pupitre de nave-
gación que cuenta con un banco pro-
pio y permite trabajar en la posición
tradicional, mirando hacia proa. Tras
él se encuentra el recinto del baño de
invitados.
En la banda opuesta al baño hay un
mostrador de cocina en forma de L
que se ve también muy cuidado, con
su fogón de gran calidad y su platafor-
ma de trabajo en piedra sintética. Ta-
quillas, cajones y buenos espacios han
sido convenientemente repartidos por
el diseño efectivo del astillero.
La acomodación es pues amplia y
adecuada para un velero de la talla
Limpieza y eficacia
El enrollador va escondido, al
igual que el molinete. La regala
es elegante. Tras el pozo de
fondeo se encuentra un pique
cuya escotilla queda también
disimulada por la teca.
Acceso y chapuzón
Se ha pensado tanto en el salto
al muelle como en el placer
del baño. La plataforma de
popa es útil y no perjudica el
espacio disponible en el pozo
de lazareto.
Fondos impecables
Las panas de suelo van
apoyadas sobre una plataforma
de madera que a su vez
descansa en los refuerzos. La
retícula tiene imbornales bien
pensados para la limpieza.
Cuadro completo
Como en los barcos mayores
y de prestigio, el cuadro
eléctrico está bien diseñado y
usa interruptores reales. Una
sección está dedicada a la
corriente alterna en 220 v.
Espacio para timonel
La bañera queda claramente
dividida por la ubicación de la
barra de escota y los timones,
de ruedas muy amplias y
bitácoras cómodas. La brazola
acoge compases muy prácticos.
Cadenotes estratificados
La búsqueda de eficacia y
elegancia se suman en estos
cadenotes colocados en
la borda y perfectamente
integrados en la regala
elevada.
Madera bien tratada
La mesa y sus dos alas, que
ofrecen una doble utilización,
es muestra del trabajo cuidado
que los ebanistas de SeRiGi
han practicado en todo el
velero.
Fogón, fregaderos y nevera
Aunque ocupa sólo una L, la
cocina tiene suficiente extensión
y se ha equipado con buenos
electrodomésticos. La nevera es
grande y cómoda.
Taquillas bien resueltas
Detalle de las taquillas de cocina
con sus puertas lacadas provistas
de bisel, su cierra mínimo pero
eficaz y los soportes para vajilla
bien pensados.
FOCO EN
2.
La parte frontal
de la bañera
culmina en un
tambucho amplio
y bien protegido
por rompeaguas.
Una ranura acoge
la capota y su
estructura. El piano
es cómodo en
maniobra.
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