Página 107 - N & Y Magazine - Número 2

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entra en la cabina se comprueba que en el interior
de barco no hay ningún punto en el que una persona
adulta pueda ponerse en pie.
La incomodidad de la vida en el interior no es el
único resultado de la batalla contra el peso; la inge-
niería de la construcción ha hecho mucho hincapié
en este punto (la cubierta, por ejemplo, es un ele-
mento estructural que permite eliminar refuerzos), y
Sansó está también muy satisfecho con el resultado.
Siguiendo la tendencia actual, el palo se encuentra
bastante retrasado, y también la quilla, en una clara
apuesta por los rumbos portantes; todo hace pensar
que el Acciona no destacará en las ceñidas (tampoco
tiene un tanque de lastre en proa, característico de
otros IMOCA), pero este no es un aspecto que parez-
ca preocupar excesivamente a Bubi Sansó. Sabido es
que las vueltas al mundo no suelen decidirse en las
ceñidas, pese a que las puertas de
seguridad que se imponen
en el Gran Sur implican
un mayor porcentaje de
navegación contra el viento.
INVESTIGACIÓN Y
DESARROLLO EN LOS APÉNDICES
El otro punto fuerte del Acciona, según Sansó, son
sus apéndices: “Hemos dedicado mucho tiempo a la
investigación y el desarrollo de los apéndices, con
muchas pruebas en el Canal de Experiencias Hidro-
dinámicas de El Pardo”, ha comentado el patrón
mallorquín a Náutica&Yates. Destaca en este sen-
tido que las orzas son rectas, alejadas de las formas
redondeadas o inclinadas de los últimos planos Ver-
dier.
En el capítulo de la maniobra, el Acciona se apar-
ta de la tendencia de numerosos barcos de un solo
piano central. Aquí la maniobra se reparte a babor
y estribor, de acuerdo con las preferencias de Sansó.
El piano está protegido por una capota relativa-
mente corta –“la alargaremos con una protección
textil para la Vendée Globe”, ha asegurado el pa-
trón- que sorprende por su forma, inspirada en
los aviones invisibles para mejorar su resistencia al
viento.
Pero sin duda lo más interesante del Acciona es la
gestión de la electricidad. Doce metros cuadrados
de placas solares distribuidas por la borda y dos hi-
drogeneradores de 400 W cada uno en la popa son
todo lo que necesita para abastecer la energía que
requieren los múltiples sistemas de navegación y co-
municación de un velero oceánico, desde el control
de la quilla pivotante al envío de vídeos y uso de
todos los instrumentos electrónicos, incluidos los
pilotos automáticos.
El barco lleva también generadores eólicos, pero
es tal la confianza en el sistema, que ni siquiera están
montados permanentemente en cubierta, sino guar-
dados en la cabina.
Para casos de emergencia —muchos días seguidos
muy nublados y escasa velocidad—, el Acciona lleva
una pila de hidrógeno, que puede cargar las bate-
rías. Según las previsiones de Sansó, es posible que
no tenga que utilizarla en ningún momento de su
vuelta al mundo.
Si bien en un principio el patrón creía que debería
dedicar mucho tiempo a la gestión eléctrica —sa-
ber cuándo y cómo cargar las baterías—, la realidad
ha superado las previsiones más optimistas. “Desde
que salí, no me he tenido que preocupar en absoluto
de las baterías y su estado”, comentó Sansó durante
la Europa Warm’Up.
Superar la homologación de la IMOCA no fue
sencillo. Los inspectores exigieron completar las
cuatro horas de navegación a motor a una veloci-
dad mínima de 5 nudos, tal como exigen las reglas
de la clase, algo que nunca se hace cuando se trata
de motores de gasoil. “Fue un poco aburrido, pero
mantuvimos la velocidad que nos exigían hasta el
final”, explicó Sansó poco después de superar la
prueba.
©
Jesús Renedo
2.
Doce
metros
cuadrados de
placas solares
distribuidas
por la borda y
dos hidro-
generadores
de 400 W
cada uno
en la popa
son todo lo
que el barco
necesita para
abastecerse
de energía.
3.
El Acciona
se aparta de
la tendencia
de numerosos
barcos de un
solo piano
central. Aquí
la maniobra
se reparte
a babor y
estribor,
de acuerdo
con las
preferencias
de Sansó.
©
Jesús Renedo
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