Hermanos Guasch celebra su 25º aniversario. Hermanos Guasch, la náutica especializada en embarcaciones deportivas, celebra este 2019 su 25º aniversario; 25 años en los que “los Guasch”, tres hermanos apasionados por el mar y la navegación, han hecho crecer y consolidar, junto a un comprometido equipo de profesionales, un proyecto empresarial relevante en el sector.
Hoy, la compañía es un referente destacado en el panorama náutico español, habiendo consolidado una posición líder, proyectando su expansión hacia nuevos mercados, distribuyendo múltiples tipologías de embarcaciones, desde barcos de iniciación hasta yates de lujo, de vela y motor, e incluso ofreciendo servicios náuticos más amplios, como el chárter de barcos de vela y motor y, más recientemente, con la creación de un club de navegación, el Beneteau Boat Club. Una carrera que ahora vive su más esplendorosa etapa, con la consolidación de los proyectos de expansión y la incorporación en el ejercicio pasado de marcas como Leopard Catamarans, Monte Carlo Yachts o Sasga Yachts. Inicios de esfuerzo y tesón “Los Guasch” empezaron su andadura en la náutica reparando embarcaciones en las costas catalanas, ofreciendo un servicio postventa muy a medida para el cliente de la época, sobre todo cuando la mayoría de talleres permanecían cerrados.
Ello les generó una buena cartera de clientes, con un alto grado de satisfacción, lo que propició un crecimiento sostenido, y lo más importante, supieron ganarse su complicidad y confianza. Con el tiempo, iniciaron la comercialización de embarcaciones deportivas hasta que consiguieron la distribución exclusiva
de una marca líder en el sector: Beneteau.
Un crecimiento firme
Cuando el crecimiento de Hermanos Guasch era un hecho más que palpable, la compañía decidió, arrancado el nuevo milenio, dar un firme paso para consolidar su posición: inaugurar su actual sede corporativa. El centro, que cuenta con 7.000 m2 dedicados exclusivamente a la náutica, permitió y permite hoy prestar un amplio abanico de servicios a los clientes más exigentes, tanto de vela como de motor.
Tras 15 años de empresa y con una trayectoria de consolidación paulatina, “la crisis”, que sobrevoló el cielo de todos los tejidos empresariales y como no, el del sector náutico de forma más acusada, afectó también a la evolución de los proyectos que iba consolidando Hermanos Guasch. Un bajón que afectó a las ventas, pero no la moral del equipo y de los hermanos. Josep Maria, Eloi y Rodolf Guasch, una familia altamente cohesionada, lucharon por trabajar más intensivamente, hacer piña con su equipo, mantener los puestos de trabajo, apostar por la náutica de base, centrarse en la venta en otros mercados y salir a vender como nunca antes: ferias, salones…
“Lo fácil era reducir costes publicitarios, estructura y plantilla; pero no apostamos por irnos a la zona de confort y tuvimos toda la mano izquierda posible en ese momento. Fue de las decisiones más complicadas de nuestra trayectoria empresarial…” explica el CEO de la empresa, Rodolf Guasch, y añade que “sabíamos que la situación no duraría para siempre y que si manteníamos esa dirección saldríamos reforzados y posicionados en el mercado después del esfuerzo… alguna cosa en mi interior me decía que ese era el camino correcto, y aunque era un camino espinoso, debíamos perseverar en esa dirección hasta que llegara nuestro momento”. Y así ha sido. 2019: “año bisagra” Hoy, la empresa afronta una etapa vital para su futuro: seguir consolidando y conservando la
esencia de todo aquello que les ha llevado hasta aquí. En ella, una dedicación entregada para servir a los clientes, los esfuerzos para seguir siendo un concesionario líder en España, consolidar la apertura de las nuevas sedes y la mejora constante de los servicios náuticos que prestan, serán aspectos clave. Todo ello, conservando un talante humilde, ilusión y muchas ganas de trabajar.