Linjett Yachts cuenta con dos gamas bien diferencias. La primera la conforman los tres modelos de 34, 39 y 43 pies de su línea tradicional y la segunda, los dos modelos de 43 y 50 pies de la gama Shogun Yachts. Dos de ellos han sido nominado a los premios European Yacht Of The Year y, ciertamente, son pocos los astilleros que han demostrado este nivel de calidad con modelos tan diversos.
Texto: Diego Yriarte
Fotos: Shogun Yachts
Para quienes navegamos en el Mediterráneo o simplemente en aguas que no se congelan, resulta extraño que barcos que provienen de las gélidas aguas suecas sean tan agradables en nuestras latitudes. Es evidente que durante el transcurso del tiempo han sabido interpretar las necesidades de la navegación de crucero y superar las exigencias de otros mercados, pero sin descuidar a sus clientes más cercanos.
Alguna de sus claves
Recientemente hemos viajado a Suecia para visitar el astilleo Linjett Yachts, ver cómo construyen sus embarcaciones y descubrir cuáles son las claves de su éxito.
La atención personaliza que el astillero sueco Linjett brinda a sus clientes es, por así decirlo, muy superior a la media y logra una tasa de fidelización muy elevada. Más allá de un tapizado u otro, una electrónica u otra o todos los deseos que el futuro armador quiera materializar a bordo, el astillero gestiona muy bien la relación de post venta, podríamos decir que “no se olvida del barco que ha construido”. De hecho, con su flota local, de aproximadamente unas doscientas embarcaciones, esta fidelización se lleva al extremo. Esta relación, además, está condicionada por la meteorología reinante en la zona dado que el período invernal no invita a disfrutar de la navegación. Por ello el astillero saca los barcos del agua para invernarlos en seco. De hecho, una gran parte de la superficie techada de sus inmensas instalaciones corresponde al invernaje de las doscientas embarcaciones Linjett y Shogun de la flota local. Prácticamente desde el inicio del otoño hasta el mes de abril se mantienen bajo cubierto y, al iniciarse la temporada, el astillero estalla en un ritmo frenético de montaje de mástiles y puesta a son de mar de 26 embarcaciones por semana.
Las ventajas que conlleva este sistema beneficia a ambas partes. Por un lado, la temporada invernal permite planificar las operaciones de reparación y mantenimiento. ¡Las embarcaciones no pueden estar en mejores manos!
Por otro lado, el buen cuidado redunda en ahorro para el armador y el astillero gana en conocimiento de sus propias embarcaciones a lo largo del tiempo de uso. Desgaste, fatiga, mejoras de diseño… es como tener un gran banco de pruebas que año tras año ofrece información de cómo mejorar el producto.
Linjett Yachts también tiene muy presentes a los armadores que no están tan próximos a sus instalaciones e incluso fuera de sus fronteras. Para brindarles servicio, el astillero ha implementado una certificación que otorga a determinadas empresas externas, a las que reconoce como capaces de brindar un servicio con el mismo estándar de calidad y conocimiento que el propio astillero sueco. Dichas empresas son recomendadas a los clientes que no pueden acercar el barco hasta sus instalaciones.
Todo bajo un mismo techo
En realidad, bajo varios techos, pero lo importante es que la producción desde el inicio hasta el final se realiza en las instalaciones del astillero con una gran dedicación. Laminado, carpintería, electricidad, jarcia, etc. Cada uno de los Linjett, desde el diseño hasta la entrega, ha salido del astillero de la ciudad de Norrtälje, ubicada a una hora de Estocolmo. Incluso la carpintería, en la que se destaca el uso de madera de caoba para los Linjett y roble para los Shogun, mantiene toda su producción en las propias instalaciones.
Este astillero tiene profundas raíces en la historia de la construcción naval sueca y sus inicios datan de 1886, fecha en la que inició su producción con el nombre de Rosätra Boaryard. Si bien hay centenares de barcos, salidos de sus instalaciones, repartidos por el mundo, nunca se ha caracterizado por una producción numerosa, sino por una construcción con dedicación, artesanía y tecnología en dosis equilibradas.
El primer Linjett propiamente dicho salió del astillero en 1974 y tenía 30 pies de eslora. A lo largo de los años la gama se desarrolló con varios modelos de entre 30 y 43 pies, hasta que nació la opción de producir una nueva gama más tecnológica, utilizando materiales de última generación. Shogun Yachts nació con el espíritu de navegar rápido y fácil. Oscar Södergren es su diseñador y ha concebido un barco para amantes de la navegación a vela en el que ha incluido la mayor cantidad posible de reglajes, incluida la modificación del ángulo de los timones para evitar el reflujo del timón de barlovento y mejorar la efectividad del de sotavento. La construcción se ha realizado íntegramente en fibra de carbono y el interior, que luce más cálido y lujoso que un barco de regatas, es súper ligero al utilizar divinicell y láminas de fibra de carbono con acabado de roble para mamparos y puertas. Esto también permite que el barco sea más silencioso.
El Shogun 43 fue nominado al European Yacht Of The Year 2024, pero su diseñador ya había ganado este prestigioso premio. Lo hizo el año anterior con un barco totalmente diferente, el Linjett 39. Ligeramente diferente al resto de los Linjett, ofrece innovaciones inteligentes, particularmente a la hora del mantenimiento como, por ejemplo, el fácil acceso a los espacios vitales. También tiene un francobordo más alto que los otros modelos de 34 y 43 pies, pero además es el punto de fusión entre la artesanía propia del astillero y el desarrollo tecnológico mediante el diseño en 3D que ha permitido optimizar cada palmo de barco.
Esencia centenaria
Daniel Gustafsson es el actual CEO del astillero y quien ha sido capaz de combinar la excelencia de los modelos tradicionales con barcos de crucero-regata, elegantes, de líneas atemporales, calidad de construcción y calidez de interiores. Este astillero que atesora más de un siglo de conocimientos ha logrado evolucionar y dar un paso vanguardista con la incorporación de Shogun Yachts una línea que comenzó con un modelo de 50 pies y que actualmente está construyendo la cuarta unidad del 43 pies.
La relación con las personas que han adquirido uno de sus barcos no se acaba cuando el barco sale del astillero, muy por el contrario, brinda un trato personalizado, proporcionando con ello una gran seguridad a su clientela en cualquier lugar del mundo.
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