La entidad de certificación y clasificación RINA, fundada como Registro Italiano Navale en 1861 en Génova, y cofundadora en 1968, junto con otras seis importantes entidades internacionales de registro, de la International Association of Classification Societies (IACS), destaca por el servicio rápido y cualificado durante todo el ciclo de vida de un yate: desde el diseño hasta la construcción, pruebas de materiales y componentes, pruebas de mar e inspecciones periódicas.
La clasificación de buques ha sido el núcleo de RINA desde sus inicios. Sin embargo, además de marina y certificación, RINA cubre áreas de negocio tan diversas como la energía, transporte e infraestructuras, industria, sector inmobiliario, I+D, ingeniería medioambiental, defensa, sostenibilidad, renovables e industria 4.0, entre otros campos de actividad, y cuenta con una red internacional de más de 200 oficinas y más de 4.600 empleados en todo el mundo.
En la actualidad el sector marítimo de RINA contribuye con el 26% de su facturación, lo que la convierte en una de las sociedades de clasificación marítima más importantes del mundo siendo autorizada para realizar inspecciones a bordo por 116 Administraciones de Bandera.
Seguimiento integral
Los servicios integrados de RINA cubren todo el ciclo de un barco, desde el diseño a los estudios para mantener la clase, pasando por la construcción, gestión de astilleros, la inspección y las pruebas de materiales y componentes hasta la botadura de la embarcación, garantizando que las embarcaciones certificadas por ella cumple con los más altos estándares de seguridad y mejoran su valor comercial durante toda la vida útil de la embarcación.
La Directiva 2013/53/UE establece que las embarcaciones de nueva construcción de hasta 24 m de eslora de casco deben llevar el marcado CE para poder comercializarse libremente en cualquier lugar del Espacio Económico Europeo.
Tal y como establece la Decisión nº 768/2008/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, el proceso se basa en ocho procedimientos de evaluación que se aplican a las fases de diseño y fabricación: desde el control interno de producción hasta verificación del producto y el aseguramiento total de la calidad, en base a criterios
de construcción y equipamiento establecidos por la directiva europea, y relacionado con aspectos fundamentales, tales como: la salud y la seguridad de los pasajeros, calidad del producto, su impacto medioambiental y la protección del consumidor.
De esta forma, a partir de la solicitud de certificación por parte del cliente, RINA inicia las actividades de verificación correspondientes al módulo de auditoría elegido: examen de la documentación y planos de construcción, visitas in situ para verificar la conformidad del producto con los planos presentados y la calidad del proceso de construcción y visitas a bordo para comprobar que se han cumplido todos los requisitos esenciales del marcado CE. En definitiva, supervisa la embarcación desde la fase de diseño preliminar hasta la botadura del producto terminado.
El futuro es la inspección remota
Siguiendo la evolución y las posibilidades que ofrece la transformación digital RINA implementó, ya desde antes de la pandemia, la tecnología y los protocolos para las inspecciones remotas realizado cientos de inspecciones con esta tecnología y reduciendo al mismo tiempo la huella ambiental de la inspección en sí.
El núcleo del servicio de inspección remota de RINA es el software, que se puede usar simplemente mediante un teléfono móvil. Sin embargo, la solución tecnológica Kiber ofrece una herramienta de última generación para aumentar aún más la precisión. Cualquiera de los dos métodos ofrece una imagen clara de la situación a bordo y permiten llevar a cabo varios tipos de inspecciones de manera eficiente y rentable.
Esta transformación digital se extiende también a la aprobación de planos, por lo que RINA ha desarrollado una plataforma donde los diseñadores y los técnicos pueden trabajar en colaboración en dibujos 2D o, cada vez más, en modelos 3D, aumentando la eficiencia del proceso de aprobación y ahorrando hasta un 50 % del tiempo necesario en comparación con los enfoques tradicionales. Esto permite rastrear todas las modificaciones realizadas durante el proceso de diseño y a lo largo de la vida útil del yate a medida que se realizan modificaciones y permite recopilar y mantener en un solo lugar todos los datos relevantes de una construcción.
Otro desafío importante en este terreno es el de la ciberseguridad y en línea con esta necesidad, RINA ha lanzado la notación de clase adicional, “Resiliencia Cibernética”, que considera la protección de datos tanto desde el punto de vista de la tecnología operativa como de la tecnología de la información. También ha adquirido la empresa, Cyber Partners, para apoyar a los propietarios y administradores en esta área crítica a través de actividades específicas como la evaluación de vulnerabilidades y el análisis de riesgos de todos los activos conectados.
Compromiso con la sostenibilidad
A diferencia del sector de la marina mercante, la navegación a vela aún no se ve tan afectada por el objetivo de descarbonización de IMO 2030/2050 pero desde RINA están convencidos que el sector debe estar preparado y ser proactivo en la reducción de emisiones y proponer regulaciones que se adapten al perfil operativo de los yates fomentando que las nuevas construcciones se adapten a la tecnología verde del futuro. En esta línea RINA está promoviendo actividades de descarbonización en el sector con soluciones confiables y efectivas, y está apoyando a organizaciones como la Water Revolution Foundation, que está trabajando de manera proactiva para establecer y reducir el impacto de los superyates a lo largo de su ciclo de vida.
RINA en España
En España, particularmente el área entre las Islas Baleares, Barcelona, Tarragona y Valencia, RINA cuenta con un equipo con plenas capacidades técnicas y operativas dedicado localmente para ayudar a los astilleros, gerentes, propietarios y diseñadores, una presencia que se ampliará en un futuro próximo.
RINA no solo ofrece inspecciones de mantenimiento de primer nivel, sino que también brinda una completa gama de servicios de consultoría e ingeniería y, el año pasado, llevó a cabo más de 200 inspecciones en superyates y megayates.
También está colaborando con organizaciones, entidades y clústeres españoles, como socio del Balearic Marine Cluster y del Barcelona Clúster Nàutic, como prueba de su compromiso de apoyar e impulsar el mercado náutico español.
rina.org