Pese a su interior de crucero, basta con dotar al nuevo Salona 33 con el pack de competición para que se materialice el alma competitiva que apunta en el diseño.
Autor: Germán de Soler
Hay cruceros a los que es quimérico transformar en un barco competitivo en los campos de regata y veleros con ADN de competición con los que una travesía con viento puede convertirse en un mal sueño para una tripulación no experimentada, por la atención y el trabajo que exigirán.
El astillero croata Salona Yachts ofrece con este 33 pies un velero que brinda las adecuadas condiciones para ser usado como crucero, pero que puede vestirse de regata con plena confianza, eso sí abonando el diferencial de algo más de 18.000 euros sobre el precio base de 84.900 euros que supone construir casco y cubierta en infusión epoxy y viniléster, dotarlo de mástil largo, jarcia y drizas de Dyneema, lazy jacks y layzy bag, quilla con bulbo de plomo optimizada por Jason Ker, acastillaje Harken, y si se dese, botalón integrado.
Pero Salona no prima una versión sobre la otras si no que aplica en el Salona 33 los mismos elevados estándares de calidad que caracterizan a todos los modelos, tras los cuales se encuentra la mano del equipo de dibujo de J&J. Mamparos laminados al casco, laminación manual en fibra de vidrio y por infusión, optimización de la robustez mediante la utilización de fibra de vidrio unidireccional, biaxial y triaxial, resinas de epoxi y vinyléster, refuerzos de fibra de carbono en zonas de esfuerzo y estructura de acero inoxidable laminada al casco, que soporta la carga del palo, los obenques y la orza, y casco y cubierta unidos con adhesivo estructural y acabada con regala de teca.
Su propietario se encontrará pues, en la versión estándar menos radical, con un crucero-regata osado dotado de todos los elementos que caracterizan a un crucero-regata.El mástil es pasante, de aluminio anodizado, con dos pisos de crucetas retrasadas 20º y carlinga de inox y equipa sistema de rizos automático y contra rígida.
La popa abierta es ancha, para maximizar el espacio de trabajo en la bañera, el carro de escota de mayor es largo, el baquestay es en pata de gallo con aparejo desmultiplicador a las bandas que no incomoda el acceso, y la larga caña de gobierno se encuentra muy atrasada hacia popa, descentrada respecto al eje del timón.
Todo esto configura un espacio de maniobra por donde es fácil moverse y en la que el caña tiene la escota y el carro de mayor bien a mano, así como el trim del baquestay, que puede reenviarse a las dos bandas, toda vez que puede apoyarse en los imprescindibles reposapiés en una bañera de trabajo de este ancho.
A proa de este espacio, típico de un barco de competición y pensado para afinar y no relajarse, contamos con dos banquetas listonadas en teca con buenos respaldos y una mesa central con dos alas abatibles, también de teca, que al quedar plegadas ofrecen un robusto punto de apoyo. Desde aquí se trabaja el piano y los winches que recogen las escotas. Hay cofres estancos en estribor y babor y cofre de almacenaje en popa.
La posición entrada de la base de los cadenotes, el carril de escota de génova largo, el enrollador situado bajo cubierta y el botalón para asimétrico —que en nuestro caso era fijo— son los últimos elementos que dibujan una cubierta pensada con la eficacia en la mente.
Interior
Las ventanas del casco y de la caseta resultan en un interior luminoso, toda vez que el francobordo, más bien contenido, da sin embargo suficiente altura. El concepto es clásico y funcional, combinando el contramolde en las zonas visibles de las bandas con mamparos, superficies y detalles en madera que puede ser teca, roble o caoba y tapicerías color arena en estándar. El suelo es laminado y los marcos de las puertas son de madera maciza.
Ofrece de serie dos cabinas y un baño además de una cocina en L, con un fregadero de inox y nevera de apertura superior, opcionalmente de 80 litros. La mesa de cartas con superficie en madera con guardamares se monta sobre el contramolde y dispone de un panel con espacio suficiente para la electrónica.
En popa, a una banda se encuentra una cabina con cama doble con estiba bajo ella y armario de doble puerta, y a la otra el baño, que aprovecha el espacio más atrasado como armario abierto para estiba de equipamiento o ropa húmeda.
Cocina y baño disponen de agua presurizada, con grifos de mezcla caliente-fria y depósitos de 100 litros. El espacio central lo ocupa el salón, con bancos a ambas bandas y mesa central de ales abatibles con botellero central. Bajo las colchonetas hay suficiente capacidad de estiba, y el astillero ofrece la posibilidad de convertirlas en camas.
Aunque esencial, el interior puede adecuarse para hacer más cómoda la vida a bordo, de manera que el astillero ofrece calefacción Webasto Airtop 3.900 W, un tanque extra de agua de 90 litros o bomba de pie de agua salada en cocina.
En navegación
De serie el Salona 33 se ofrece en la versión crucero con mayor y génova enrollable 140 % de dacron, que es la configuración con que navegamos y gobierno con caña, aunque también puede dotarse opcionalmente de dos timones con rueda de 80 centímetros de diámetro y velas Pentex o de Spectra en la versión de competición.
También ofrece un paquete de electrónica completo B&G Triton por 3.236 euros y piloto automático de la misma marca por 4.920 euros.
En la salida realizada, con un viento real de 15-18 nudos, mar rizadilla y cuatro tripulantes, se puso de manifiesto que nos encontrábamos a bordo de un barco rápido, cuyo interior adaptado al crucero no ocultaba una clara vocación de competir. La facilidad a la hora de movernos por cubierta, la disposición de la maniobra, las posibilidades de trimado, una caña sensible y eficaz y una excelente capacidad de punteo indicaban que teníamos bajo nosotros unos apéndices equilibrados.
En estas condiciones nos quedamos con las ganas de izar el asimétrico y así comprobar lo que realmente daba de sí el diseño de J&J. Sin embargo, con la configuración estándar y la versión de quilla intermedia de entre todas pasibilidades que ofrece, el Salona 33 nos permitió apurar la ceñida a 28-30º y sacarle 6,8 nudos, velocidad que se incrementaba a 7,1 al abrirnos a un descuartelar y se mantenía en siete del través. Con sus casi cinco toneladas de desplazamiento. El Salona es un velero receptivo al movimiento de pesos a bordo y que devuelve excelentes sensaciones cuando se le sabe trimar con finura. Es en este sentido un barco que ofrece las condiciones para satisfacer a un propietario exigente que disfrute sacándole el máximo partido a su velero y que a la vez permite su disfrute en buenas manos y con cierta comodidad como crucero.
El Yanmar de 20 caballos Saildrive con hélice de dos palas plegable le permite navegar a 6,4 nudos en velocidad de crucero a 3.000 vueltas y a 7,1 apurando el máximo las revoluciones a 3.600. Velocidad más que satisfactoria cuando las condiciones, el plan de navegación o la prisa lo exijan.
Características
●Eslora total: 9,99 m
●Eslora de flotación: 9,04 m
●Manga: 3.35 m
● Desplazamiento: 4.900 Kg
● Lastre 1.100 Kg
● Calado: 1,50/1,75 /2,0/2,15 m
● Sup. Vélica total: 69,50 m2
● Mayor : 32 m2
● Genova enrollable: 37,50 m2
● Motorización: Yanmar 3YM20C 20 Hp Saildrive con hélice plegable de dos palas.
● Capacidad de agua: 100 l
● Capacidad de combustible: 90 l
● Depósito de aguas negras:: 42 l
● Diseño: J& J
● Construcción: Salona Yachts
● Importador: Wind Barcelona
● Precio: 84.900 euros
La opinión de [N&Y]
Diseño
+ Bañera de maniobra ancha y ergonómica
+ Pasos hacia proa despejados
+ Caña atrasada
+ Escotilla de proa amplia
+ Acceso a bañeraAcomodación
+ Baño espacioso
+ Posibilidad de seis camas
+ Altura interior
– Nevera escasaCubierta
+ Botalón integrado
+Tambor del Enrollador enrasado
+ Carro de mayor largo
+ Buena posición del caña
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