“Es una necesidad precisa que el futuro reglamento unifique y modernice toda la normativa que regula nuestra actividad”.
Si recuerda el lector, con motivo del Congreso de Anen del pasado año celebrado en San Sebastián, en la ponencia vinculada a legislación náutica, se abordó la oportunidad de la posible creación de una mesa de trabajo que tuviera por objeto la unificación y modernización de toda la legislación que afecta a la navegación de recreo.
Dicho de otro modo, tener ambición como sector y aprovechar un único marco normativo para reunificar y actualizar toda la normativa que afecta a nuestra actividad, y que previsiblemente tendrá la calificación de reglamento.
ANEN no suele desaprovechar las oportunidades y gracias también al compromiso y colaboración de la administración marítima, se consiguió publicar la orden firmada por la entonces Ministra de Transporte de fecha 26 de julio que tiene por objetivo la creación oficial y formal del grupo de trabajo para la elaboración de una propuesta de Reglamento general de la navegación de recreo.
Es una necesidad precisa que este futuro reglamento unifique y modernice toda la normativa que regula nuestra actividad. En la actualidad son 14 reales decretos, diversas órdenes ministeriales y decenas de instrucciones de servicio las que regulan nuestra actividad. Un auténtico caos normativo que genera inseguridad jurídica y nos impide competir con nuestros países vecinos que ya han modernizado sus legislaciones para atender esta necesidad (como Italia o Croacia fundamentalmente).
Materias como registro y abanderamiento, seguridad, certificaciones e inspecciones, permiso temporal de navegación, titulaciones náuticas, concentraciones náuticas, aseguramiento y, en su caso, materias de derecho privado como el arrendamiento náutico o el contrato de amarre serán objeto de revisión en este futuro reglamento.
Los miembros de la comisión, en la cual tengo también el placer de participar, son los catedráticos de derecho mercantil María José Morillas, María Victoria Petit, Juan Luis Pulio. Y Julio Fuentes, Gerardo Vallejo, Sonia Barbeira y Jesús Blanco por parte de la administración marítima.
El plazo que disponemos para abordar un trabajo que esperamos sea un punto de inflexión en nuestro sector desde el punto de vista normativo es de nueve meses y finalizaría antes del próximo verano.
Una vez constituida formalmente la mesa el pasado septiembre, la actividad está siendo frenética e intensa y hasta la fecha ya hemos tenido la oportunidad de reuniones en hasta siete ocasiones en las instalaciones de la Dirección General de la Marina Mercante.
Les iremos informando próximamente de los avances que pudiera tener, pero ya les adelanto que no vamos a desaprovechar esta oportunidad única del sector.
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