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L
a firma Windy tiene uno
de los catálogos más com-
pletos dentro del progra-
ma de sport cruisers, con
nueve modelos que abarcan desde los
26 hasta los 52 pies. La Zonda es la
séptima en tamaño, por delante de la
29 Coho y la 26 Kharma.
La 31 Zonda combina lujo y cali-
dad, estilo y prestaciones, elegancia
y detalles imaginativos, confort y
buenas sensaciones… Es uno de esos
modelos de los que uno se puede
arrepentir por no haberlos probado
cuando se presentaron, en este caso
hace cinco años. No obstante, es
un barco totalmente vigente, que
ha sufrido pequeñas modificaciones
con el tiempo, pero sin afectar a lo
esencial. Depósitos de combustible
y agua de mayor capacidad, mejora
de tapizados, y alguna que otra cosa
que seguramente no adivinaríamos.
En todo caso, este modelo nos sigue
pareciendo de lo mejorcito en su
segmento de sport cruiser de nueve
metros y medio.
1.
De elegante
estética, la 31
Zonda es una
sport cruiser
dotada de una
gran carena,
rápida y marinera.
L. B.
Windy 31 Zonda
PRUEBA MOTOR
Divertida, rápida, muy maniobrable y sobre todo sólida, así es esta 31 pies de la firma
nórdica Windy, un modelo con algunos años en el mercado pero que se mantiene como el
primer día. Un buen diseño, imagen atractiva y una carena robusta y con una acentuada V
permite a esta sport cruiser ofrecer lo mejor de la marca noruega en este tamaño de eslora.
Velocidad máxima: 43,2 nudos a
3.900 rpm
Velocidad de crucero: 29 nudos a
2.800 rpm, con dos Volvo Penta D3-
220 EVC de 220 Hp.
Tiempo de planeo: 12 segundos.
Aceleración de 0 a 43,2 nudos: en 23
segundos.
Autonomía: en torno a las 254 millas
a régimen máximo; y unas 325 millas
a régimen de crucero de 29 nudos.
Precio: a consultar con el
importador.
¡Excitante!
1
CUBIERTA Y BAÑERA
La 31 Zonda, además de mostrar
una estética atractiva de la bañera
y de las líneas de perfil en general,
está repleta de detalles que reafir-
man la calidad de la marca. Si bien
la distribución de la bañera es bas-
tante conservadora, con un sofá so-
lárium ocupando toda la parte pos-
terior, sobre la tapa de los motores,
y con dos asientos mirando a popa,
situados tras el puesto de gobierno y
del asiento del acompañante de ba-
bor, hay otras cosas que nos gustan
especialmente, como los numerosos
cofres repartidos por todo el barco,
o el sistema de estiba de la toldina,
o la ubicación en el suelo de la neve-
ra, o los herrajes de inoxidable que