[PRUEBA MOTOR]
Absolute 58 Fly
122
22
NAVEGACIÓN Y
CONCLUSIONES
Absolute no es solamente un barco
bonito, sino que tradicionalmente el
astillero ha tenido una especial pre-
ocupación por las prestaciones en el
agua de sus barcos. Aspectos como la
autonomía, la capacidad de manio-
bra, la eficiencia, el confort y la segu-
ridad, son denominadores comunes
en los cruceros de la marca, y en esta
58 Fly.
Navegamos este crucero en aguas
del Adriático, en Portopiccolo, con
motivo de la presentación de los
nuevos Absolute la pasada primave-
ra. Las condiciones de mar y viento
fueron bastante favorables para un
barco de este tamaño, por lo que tu-
vimos que buscar el oleaje esperando
a que arreciara el viento. Con mare-
jadilla la carena de esta 58 Fly no se
entera. Pasa la ola con tal suavidad
INTERIORES
Absolute trabaja muy bien los inte-
riores, tanto en el aspecto práctico y
funcional, como en el de la decora-
ción, empleando materiales de ca-
lidad y tecnologías de vanguardia.
Incorpora detalles como las luces led
a lo largo de todo el salón; los gran-
des ventanales de vidrio de este espa-
cio y los espejos, que permiten una
vista panorámica desde los sofás; las
maderas laqueadas con impecables
acabados de carpintería, evitando los
cantos vivos y las aristas agresivas; o
el diseño de piezas especiales como
la pata de la mesa del salón, etc.
Además, la distribución de este
barco juega con formas distintas a
lo que es habitual en embarcaciones
de esta tipología. La cocina, arriba,
junto a la entrada al salón, forma un
ángulo para acoger todos los elemen-
tos en el menor espacio posible, y se
separa del salón mediante un vidrio
deslizante.
La zona de noche distribuye tres
cabinas dobles con tres aseos com-
pletos. Se beneficia de varios as-
pectos básicos. Por una parte de la
notable altura de la cabinas que se
obtiene gracias al francobordo del
barco, y por la otra las grandes ven-
tanas de cada uno de los camarotes.
Además, el espacio habitable abarca
más de dos tercios de la eslora be-
neficiándose de los Volvo Penta con
IPS, que ocupan menos espacio en la
cámara de motores.
La cabina del armador, a media
eslora, abarca toda la manga. Es un
espacio invadido por la luz natural
gracias a las enormes ventanas de los
costados, con un elegnte mobiliario
de alto nivel. Dispone de aseo inte-
grado con puertas correderas para
aprovechar el espacio. La cabina VIP
ocupa la proa, con el cabezal de la
cama en la amura de estribor, tam-
bién con su aseo completo, y la de
invitados, a estribor, puede unir las
dos literas en una única de matrimo-
nio. El tercer aseo da al distribuidor
y a esta cabina. Como es de imagi-
nar, los baños, todos con ducha, son
de diseño, y las cabinas cuidadas en
el menor detalle, además de ser volu-
minosas cuentan con sus respectivos
armarios y tocadores, en el caso de
las dos grandes.
Interiores dominados por la luz y
el espacio, con una decoración ex-
quisita, bien concebidos para la vida
a bordo, sin elementos superfluos,
propios de un barco de mayor eslora.
18
20
23
18 y 19.
La cabina
del armador, a
media eslora, ocupa
toda la manga y
cuenta con grandes
ventanas laterales.
20 y 21.
El camarote
de invitados puede
unir las dos literas
formando una cama
doble.
22 y 23.
Los tres
aseos con ducha
independiente son
una muestra de los
últimos diseños
italianos.
24.
La cabina de
proa dispone la
cama con el cabezal
en la amura de
babor con el fin de
ganar en amplitud.
19
21
24
