[Mantenimiento]
El motor interior en el barco de ocasión
54
Vayamos más lejos
Las primeras pruebas tienen que ha-
cerse en puerto. Arrancamos el motor
y comprobamos:
1.
Que el agua de refrigeración circula
correctamente.
2.
El humo:
Si es blanco significa casi siempre
que existe un problema en el cir-
cuito de agua.
Si es negro, una mala combus-
tión, que quema aceite.
3.
Si el motor echa aceite por el
escape, el tema es ya más grave.
En frío, si solamente se observa
humo blanco no hay que preocuparse
si desaparece cuando el motor alcanza
su temperatura de funcionamiento.
Tengamos en cuenta que los motores
turbodiésel de los años ochenta, tie-
nen tendencia a echar humo blanco.
Esto no ocurre en los motores de nue-
va generación, gestionados electróni-
camente.
La prueba en el mar
Todo parece normal en puerto, el mo-
tor arranca bien, no humea de forma
inquietante y sube de temperatura
con normalidad: solamente nos queda
efectuar una primera prueba de nave-
gación. Para llevarla a cabo elegire-
mos un día de buen tiempo en el que
podamos hacer trabajar el motor a
diferentes regímenes. De entrada na-
vegaremos a velocidad reducida hasta
que el motor alcance su temperatu-
ra de funcionamiento (entre 80 y 92
grados, dependiendo de la marca).
Cuando se llegue el techo de tempe-
ratura, subiremos progresivamente de
A nivel del
escape, se tro-
lera un humo
blanco (vapor)
que debe des-
aparecer salvo
en las antiguas
generaciones
de turbo 5
Volvo Penta,
por ejemplo;
en ningún
caso debe salir
humo negro o
aceite.
El panel de
indicadores
debe revisarse
en su totalidad,
en especial
los chivatos e
indicadores de
temperatura
y presión de
aceite.
revoluciones hasta alcanzar las máxi-
mas indicadas por el fabricante.
Los puntos a verificar
durante la prueba
Para efectuar las comprobaciones
siguientes, el panel de mandos del
motor debe contar con un mínimo de
indicadores. En los barcos a motor,
lo habitual es disponer de cuenta-
vueltas, indicadores de temperatura
del agua y presión de aceite. En los
veleros, en particular, equipados con
motor pequeño, esto se reduce a un
cuentarrevoluciones y chivatos de
temperatura y carga. Aquí, hay que
interpretar algunos puntos.
De entrada, la temperatura del
agua. No debe alcanzar rápidamente
el valor óptimo. Si no es así, significa
que el termostato que regula el flujo
de agua no funciona correctamente. Si
todo está correcto, cambiamos de ré-
gimen, de mínimo a máximo, y efec-
tuamos virajes cerrados. La tempera-
tura deberá permanecer constante.
La segunda verificación se refiere
al escape. El agua debe fluir normal-
mente, sin restos de aceite o de car-
bonilla. El humo debe corresponder a
lo que hemos visto durante los ensa-
yos en el amarre.
Aprovecharemos esta prueba para
comprobar la potencia del motor.
Debemos alcanzar las vueltas pro-
gresivamente y la velocidad ha de
ser proporcional a las revoluciones.
Todos los astilleros dan para un mo-
delo y una motorización concretos la
velocidad en función del régimen del
motor. Debemos estar próximos a es-
tas referencias.
También hemos de comprobar que
no existen fugas de agua, de carbu-
rante o de aceite. Uno de los puntos
más delicados es el circuito de gua,
desde el filtro de entrada de agua de
mar a la salida del escape. El sifón de
escape es un punto crítico. Si hay fu-
gas debe cambiarse, ya que está hecho
en un material difícil de reparar.
La charlas tras la
prueba
La negociación es el momento más
delicado entre el vendedor y el com-
prador. Todos los puntos que haya-
mos podido constatar, deben discu-
tirse y el vendedor ha de ser capaz de
responder a sus preguntas. Algunos
ejemplos concretos:
Hemos constatado una fuga en el
circuito de escape o cualquier otra
anomalía (un indicador que no fun-
ciona, por ejemplo). ¿Está el vende-
dor dispuesto a hacerse cargo de la
reparación o a tenerlo en cuenta en
el precio final?
Si el motor no entrega toda su po-
tencia y no sube de vueltas según
las especificaciones del fabrican-
te, la única manera de asegurarse
de la gravedad de esta anomalía es
requiriendo la intervención de un
mecánico. Una simple compara-
ción de la compresión nos per-
mitirá comprobar la potencia del
motor, y ver si está en una hor-
quilla razonable en relación a la
original. El reglaje de las válvulas y
el ajuste de los inyectores permi-
ten, con frecuencia, ganar algunos
caballos y reducir las emisiones de
humo. ¿Está el vendedor dispues-
La verificación de un motor interior
pasa por varias fases. Hasta la última,
con un análisis de aceite.
1...,44,45,46,47,48,49,50,51,52,53 55,56,57,58,59,60,61,62,63,64,...148