Revista Nautica Y Yates 24 - page 149

Solaris 50
[PRUEBA VELA]
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ma que produce una sensación de
placidez natural. Al ojo habituado
del buen observador no se le esca-
pa que tras las líneas limpias y en
apariencia simples del mobiliario,
se esconde una carpintería elabora-
da hasta el último detalle. Todos los
elementos están inteligentemente
dispuestos, los volúmenes son pro-
porcionado y las zonas de circula-
ción espaciosas. Hay pasamanos
central en el techo pero uno siem-
pre tiene un guardamar a mano pa-
ra moverse con seguridad en escoras
pronunciadas. La carpintería puede
escogerse, desde la madera blan-
queada hasta la más cálida en fun-
ción de los deseos del propietario.
Sentados en el salón, las ventanas
del casco —relativamente pequeñas
en comparación con otros cruceros
de su rango— permiten visión al
exterior, pero el perfil bajo de la ca-
seta que obliga a bajar el plan pa-
ra mantener la altura bajo baos im-
pone servidumbres en el tamaño y
BANDEJA SUPLETORIA
La cocina suplementa el espacio
con una bandeja plegable que
aumenta el espacio de trabajo
disponible o puede usarse como
mesilla de servicio al comedor.
ORDEN A PIE DE PALO
Toda la cabullería se concentra
en la base del mástil —en alumi-
nio de serie— desde donde se
reenvía hacia popa bajo cubier-
ta. El carril del foque autovirante
está enrasado.
SIN OBSTÁCULOS
Tambucho ancho. Todas las
escotillas son enrasadas y la
capota antirociones queda
perfectamente plegada e
integrada en la caseta en un
espacio dedicado a ella.
BANCO DE BATERÍAS
Los depósitos de agua están
situados bajo los bancos del
salón, pero uno de los cofres
se reserva para un banco de
baterías perfectamente accesible
y bien organizado.
MOTOR A LA VISTA
La escalera de teca del
tambucho se levanta mediante
pistones dejando al descubierto
la cámara del motor que también
es accesible lateralmente.
ROPA SECA
Los baños de invitados disponen
de armarios de ropa húmeda.
Una opción que debería adoptar
cualquier velero que se precie.
CAPACIDAD ESCONDIDA
La cabina de proa no solo ofrece
altura, volumen y espacio, sino
una buena capacidad bajo la
bien organizada cama doble
central, dotada de cofres y
cajones.
MANIOBRA A MANO
Cuatro winches frente a las
consolas permiten controlar
todas las líneas de escotas y
drizas, incluyendo la escota
de mayor. Los cabos corren
escamoteados bajo las brazolas.
FOCO EN
Atractivo, contemporáneo, muy habitable y bien acabado, el nuevo
Solaris es un puro placer al timón.
Pese a ser un velero rápido con vocación de batir a los rivales
en regata, el astillero no se olvida de la capacidad del Solaris
50 como crucero: la cocina lo certifica.
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