Sense 51
[PRUEBA VELA]
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1.
Proa recta,
botalón
integrado, perfil
bajo y escaso
francobordo
definen una
elegante silueta
que en el nuevo
51 culmina en
el techo rígido
descapotabñle
que protege
totalmente la
bañera.
2.
La bañera
es grande y
confortable, el
acceso es muy
directo y el paso
central es amplio.
L
a gama de veleros de crucero Sense
del astillero francés Bénéteau su-
puso una revolución en el momen-
to de su lanzamiento hace seis años
en tanto que concretaba con éxito un con-
cepto previamente ensayado por otros asti-
lleros sin demasiada fortuna y cambiaba en
cierta medida la forma de entender la vida a
bordo. Y lo hacía modificando radicalmen-
te la distribución interior respecto a la de
un velero clásico, colocando el plan del in-
terior y la cubierta casi a un mismo nivel,
desplazando todas las cabinas a proa, con la
consecuente ganancia de espacio en popa y
brindando una bañera abierta excepcional
destinada a maximizar el disfrute de la vida
en cubierta.
Además, ofrecía numerosas opciones de
aparejo a escoger en función de la zona de
navegación del propietario y convertía el in-
terior en un espacio con grandes volúmenes
y sumamente luminoso, casi transparente.
Hoy, el legendario Sense 50 que inició la ga-
ma junto con 43, se reinventa incorporando
una serie de innovaciones, especialmente en
cubierta, destinadas a acentuar la idea de
que la gama Sense está concebida esencial-
mente para viajar y disfrutar de la vida al
aire libre en el mar. Los nuevos Sense 51 y
Sense 57 —el mayor de la gama— concre-
tan de la mano de los arquitectos Berret-Ra-
coupeau y el ganibete de interiorismo Nauta
Design esta renovación que mejora con ple-
no acierto el propio concepto inicial.
UNA CUBIERTA PARA DISFRUTAR
Con un ligero incremento en la eslora de
casco y manga, el nuevo Sense 51 logra ofre-
El nuevo Sense 51 renueva el anterior modelo de
50 pies transformando la popa en una verdadera
terraza desplegable y dotándose de un techo
rígido con lona abrible que protege
totalmente la bañera.
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German de Soler