Página 70 - NAUTICA Y YATES_16

[PRUEBA MOTOR] Prestige 420
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mediante el sistema hidráulico —en
el caso de los IPS 400 de 300 Hp, el
astillero no la admite—.
Dos accesos directos a la bañera
desde la popa, cofres para las ama-
rras, y buenos herrajes tanto para el
fondeo como para puerto. Los pasos
laterales cumplen con un mínimo
de anchura, suficientes, y no echa-
mos en falta los pasamanos altos a lo
largo del fly, aunque como en otras
Prestige no llegan muy a proa y se
quedan cortos.
La pasarela es un opcional y la
mesa de la bañera también, pero está
bien resuelto el sistema de baño, con
escala y ducha en la entrada.
El flybridge es un espacio sorpren-
dente en este barco por sus dimen-
siones. Jeanneau siempre lleva bas-
tante al límite este espacio y lo sabe
aprovechar. No es desproporcionado
y no rompe la estética del barco.
En general, una zona abierta muy
bien resuelta, práctica y diseñada
para vivir a bordo con comodidad.
PUESTOS DE GOBIERNO
Prestige ha llegado a optimizar sus
puestos de gobierno. La experien-
cia de modelos similares ha servido
para lograr una buena ergonomía
en estos espacios. En el interior la
420 presenta una consola con poca
elevación, de modo que no tapa en
2. El gran sofá en
L puede acomodar
hasta seis o siete
personas en torno a
una desplegable.
3. El mueble de
servicio puede
disponer de
parrilla, fregadero y
nevera.
4. La parte
delantera del fly
queda ocupada
por un segundo
solárium.
5. El flybridge
es una buena
muestra de cómo
aprovechar bien
un espacio con sus
limitaciones.
6. La proa se
aprovecha con un
espacioso solárium.
7. El mueble
principal de la
cocina dispone de
lo esencial, con
buenos cajones
y superficie de
trabajo.
8. La zona abierta
de esta 420
refuerza el carácter
mediterráneo del
barco, con una
buena bañera y un
espacioso fly.
9. La escala de
acceso al fly,
bastante vertical,
apenas roba
espacio a la
superficie de la
bañera.
absoluto la visión frontal. Un panel
sobrio, bien distribuido, prepara-
do pata equipar una gran pantalla
multifunción, se complementa con
el joystick (que viene de serie) y
las palancas electrónicas de Volvo
Penta en el costado, así como los
flaps tipo interceptor de la misma
firma sueca. No obstante, el asiento
es fijo, sin posibilidades de ajuste,
pero no falta un buen reposapiés.
La conducción es cómoda y, como
es natural, la electrónica es un op-
cional.
En le flybridge el puesto es si-
milar, con un asiento monoplaza
ajustable con la base que se puede
plegar para gobernar de pie, y un
panel muy completo. Aquí el vo-
lante también se puede regular y la
instrumentación dispone de un am-
plio espacio en el panel su óptima
distribución. No falta ni el compás
ni el joystick, además de una pe-
queña superficie cubierta que hace
las funciones de mesa de cartas.
Dos buenos puestos de gobierno,
cómodos, sin complicaciones de di-
seño, con consolas espaciosas donde
cabrán todos los instrumentos que
se deseen colocar.
INTERIORES
El predominio en la decoración de
la madera clara de roble incrementa
la luminosidad de los interiores, al
tiempo que contrasta con los toques
oscuros de algunas partes como el
asiento del piloto o lacados en ma-
rrón.
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