Puesta a punto y carenado del barco
[MANTENIMIENTO]
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las válvula, los pasacascos y el pren-
saestopas. Un poco de agua, dulce
o salada, no es un problema grave
pero es imprescindible averiguar de
dónde procede. El compartimento
del motor, si se ha tomado la pre-
caución de limpiarlo bien antes del
invernaje, debe estar limpio. Si hay
agua, hay que revisar los manguitos
y el prensaestopas. Si lo que vemos
es aceite, el tema es más grave y, si
no encontramos la fuga, no hay más
remedio que llamar a un mecánico,
pero en ningún caso hay que dejar-
lo pasar. Si todo es normal, y no he-
mos visto ni agua ni aceite, seguire-
mos con la comprobación.
LA ELECTRICIDAD: EL
PRIMER CONTROL
Por mucho que hayan evoluciona-
do las baterías, si han estado mucho
tiempo sin mantenimiento hay que
efectuar una carga completa. Pero
antes de poner en marcha el carga-
dor, hay que comprobar que todo
lo demás esté correcto. Los bornes
deben estar limpios, las conexiones
bien apretadas y, si las baterías tie-
nen tapones (baterías abiertas) hay
que comprobar el nivel del electro-
lito. Si es bajo, hay que añadir agua
destilada, pero teniendo la precau-
ción de no rebasar el nivel de las
placas. Basta con que el agua des-
tilada añadida las cubra. Ya se pon-
drán al nivel correcto tras la carga.
Si todo está en orden, solo hay
que enchufar el cargador. Todos los
cargadores de nueva generación son
automáticos y trabajan en tres fases:
boost
o
bulk
(carga máxima, en que
la batería se carga rápidamente); la
fase de igualación o
absortion
(absor-
ción), que comienza cuando la bate-
ría está cargada al ± 80% (90% pa-
ra baterías de gel y AGM y 100%
en las de ion litio), en que las ba-
terías se ponen todas al mismo ni-
vel y termina cuando la batería es-
tá completamente cargada; y la fase
floating
(flotación) durante el que
las baterías se mantienen en ópti-
mas condiciones.
En la última fase, la
floating
, el
cargador solo proporciona una po-
tencia mínima y compensa, dentro
del límite de sus posibilidades, el
consumo de a bordo. Una recarga
completa requiere entre ocho y nue-
ve horas. Durante las primeras dos
horas no es recomendable enchufar
equipos de gran consumo (nevera,
calefactores, arranque del motor,
molinete, propulsores de proa….),
pero sí que se puede comprobar el
funcionamiento de los equipos de
poco consumo como la ilumina-
ción. En lo referente a esta últi-
ma, la revisión debe ser punto por
punto. Si todos funcionaban antes
el invierno, no hay motivo para que
una bombilla se haya fundido, por
lo que lo más probable es que, de
encontrar una avería, esta provenga
de los contactos o del interruptor.
La solución, en este caso, será lim-
piarlos con un producto especial pa-
ra contactos.
CONFORT: EQUIPOS
QUE SOPORTAN MAL LA
INACTIVIDAD
El equipo más sensible es la neve-
ra o, en su caso, el congelador. El
hecho de estar parados durante me-
ses puede conllevar un mal funcio-
namiento cuando se vuelve a poner
en marcha. Aquí hay cuatro posi-
bilidades.
1.
Arranca normalmente, se para
y vuelve a arrancar y constatamos
que enfría. Todo es normal.
2.
No arranca. Hay que compro-
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2.
La limpieza
de la cubierta
nos ayuda a ver
si hay puntos
de entrada de
agua.
3.
Hay que
revisar
el espejo
especialmente
cuando se
amarra de popa
al pantalán.
4.
Lo primero
que comproba-
remos es la pre-
sencia de agua
o combustible
en el fondo.
5.
El cargador
nos indicará
el estado de
carga de las
baterías.
6.
El equipo
más sensible es
el refrigerador.
En la foto, el
grupo de frío.
Si encontramos agua en la sentina debe
preocuparnos más si es salada que dulce.
