un multicasco monotipo para esta regata. Sin embargo,
Turner sí apuesta por la espectacularidad de un catama-
rán volador para las regatas inshore.
Lo que no ha conseguido Turner, al menos por ahora,
es convencer a la clase Imoca para que apueste por el
mismo monotipo. Pese a ello, el nuevo hombre fuerte de
la Volvo no descarta conseguir su objetivo en un futuro
no lejano: ha encargado el nuevo VOR60 al mejor de los
diseñadores de la clase Imoca, el francés Guillaume Ver-
dier, y le ha pedido que su producto pueda adaptarse con
relativa facilidad y poco coste a las normas que rigen en
la Vendée Globe y la Barcelona World Race. Para em-
pezar, llevará un mástil ala sin crucetas (unos
outriggers
abrirán el ángulo de trabajo de los obenques), como ya
sucede en buena parte de los imocas.
La idea subyacente es que cada año haya una vuelta al
mundo a vela: la Volvo en los años impares y la Vendée
o la BWR en los años pares.
L
a Volvo Ocean Race quiere más pastel. Mark
Turner, el nuevo hombre fuerte de la clásica
vuelta al mundo por etapas con tripulación, no
tiene miedo de empacharse y ha decidido que la regata
se corra cada dos años, sustituyendo los ciclos de tres
años implantados desde 2005. El motivo es evidente-
mente económico: con una vuelta al mundo cada dos
años hay mucho más negocio a repartir entre los organi-
zadores y los patrocinadores. Por si esto no bastara, deja
abierta la posibilidad de cambiar el recorrido de manera
que no siempre empiece y acabe en Europa, como ha
sucedido en todas las ediciones disputadas desde 1976,
cuando nació la Whitbread: una manera de expandir el
negocio a nuevos mercados.
Para acabar de rizar el rizo, se reinventa una com-
petición con dos barcos diametralmente opuestos a la
vez: un monocasco con foils para las etapas oceánicas y
un catamarán volador para las regatas inshore. Duran-
te semanas jugó a la incertidumbre de si se decantaría
por un monocasco o un multicasco. De hecho, todo el
mundo sabía que la elección ya estaba hecha: aún no es-
tán las cosas suficientemente maduras para apostar por
150
El nuevo
monotipo de
60 pies (18,29
metros)
monocasco y
asistido por
foils, está
diseñado por
el francés
Guillaume
Verdier.
También se
introduce un
catamarán
volador,
monotipo y
de entre 32 y
50 pies (10-15
metros) para
las regatas
costeras para
el que se ha
abierto ya
el proceso
de diseño y
construcción.
Volvo Ocean Race
La Volvo apuesta fuerte
Kiku Cusí
La VOR se correrá en monotipos
voladores de 60 pies con foils.
A partir de 2019 la vuelta al mundo con tripulación se disputará cada dos años