[CULTURA MARÍTIMA]
Escale a Sète
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2.
Réplica de
la
Nao Victoria,
reproducción
del barco de
Magallanes
construida a
principios del
2000 por un
empresario chileno
de Punta Arenas.
3.
Buque escuela
polaco
Dar
Miodziery.
Desde la terraza del ostricultor Mas de Jeanne, en
Marseillan, con las bateas al fondo.
3
U
no puede visitar Sète en cualquier época del
año —y motivos no faltan para hacerlo, como
en las fiestas de las
Justes
o torneos sobre barcos a
remo, que reúnen a decenas de miles de personas
para contemplar los combates sobre el agua. Pero
el entorno de la laguna de Thau, la mayor del
Languedoc, de 22 kilómetros de largo, ofrece muchas
más posibilidades. Una de las más interesantes es la
visita a alguno de los
Mas
a orillas de la laguna donde
se cultivan desde hace 70 años las famosas ostras de
Bouzigues. 550 productores viven de la acuicultura
y 220 pescadores se ocupan, además, de la pesca
de la dorada, la anguila, la sepia, el lenguado o la
lubina. Las 2.800
tables
o bateas producen 12.000
toneladas al año de ostras. La cifra es elevada pero
el enfoque de las familias que viven de la ostra no
es la producción masificada, sino la compatibilidad
de un medio de vida con la preservación del entorno
ecológico de la laguna, muy sensible a la acción
humana, como pudimos comprobar personalmente
en la visita al Mas de Jeanne regentado por Annie
y Henry Rouquette para degustar las diferentes
variedades que se ofrecen. Algunos de ellos ya no
acuden a los mercados, venden a los productores
vecinos y se dedican a la difusión y a dar a conocer
la producción, al tiempo que luchan por implementar
una estricta normativa ecológica para proteger aún
más el estanque. Visitar uno de estos pequeños
Mas
es una experiencia insólita, de la que uno sale
con un conocimiento del cultivo de la ostra, de sus
variedades, calidades, tamaños y sabores que nunca
hubiese imaginado.
El entorno de Sète
La ostricultura sostenible
Durante una semana la vela
tradicional llenó el frente marítimo y los
muelles de Sète.
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